Poco conocido fuera de Cataluña, el Pastor Catalán o Gos d’Atura es un excelente perro de compañía, siempre que pueda realizar todo el ejercicio que necesita. Resulta el compañero ideal para aquellas personas amantes de las excursiones y del deporte al aire libre.

Datos básicos

  • Altura: 46-51 cm.
  • Peso: 17,5-18,5 kg.
  • Esperanza de vida: 12-14 años.
  • Ideales para: personas activas.

Historia de la raza

Como no podía ser de otra manera y tal y como nos indica su nombre, los orígenes del Pastor catalán hay que buscarlos en Cataluña. Allí recibe el nombre de Gos d’Atura. Su aparición se ha situado en el siglo XVII, pero puede ser mucho más antiguo. Se dedicaba a pastorear y a vigilar el ganado, sobre todo ovejas.

En la actualidad se ha convertido en un perro de compañía y ha aumentado su popularidad tanto dentro como fuera de Cataluña, a lo que ha contribuido su tamaño mediano y su gran capacidad de adaptación. La excepción es su versión con el pelo corto, que es tan raro que se considera al borde de la extinción.

Parece que mantiene cierta relación con el Perro pastor portugués y un pariente cercano del Pastor de los Pirineos de pelo largo. Curiosamente, el estándar del Pastor catalán, determinado en el año 1929, se basa en la conformación de dos perros, un macho llamado Tac y una hembra conocida como Iris.

características-de-la-raza-Pastor-catalán

Características físicas del perro Pastor Catalán

Se trata de un perro de tamaño mediano bien proporcionado, musculoso pero ligero, ágil y atlético. La cabeza es más larga que ancha. Los ojos son redondeados y muy expresivos. Transmiten viveza e inteligencia. Su color es el ámbar oscuro y se disponen bastante juntos. Suelen estar bien tapados por el pelo.

La nariz, los labios y, dentro de la boca, el paladar duro, son de color negro. Las orejas son de inserción alta, triangulares, finas, puntiagudas y cubiertas de pelo. Su cuerpo es algo más largo que alto. Las patas están bien musculadas, lo que le permite una buena carrera. Los pies son de forma ovalada y están tapados por un pelo sedoso.

La longitud de la cola es variable. El cabello es largo y ondulado y cubre por completo el cuerpo. Tienen subpelo. Destacan sus barbas y sus bigotes, además del tupé y las sobrecejas. Lo encontramos en los colores leonado, grisáceo, negro, atigrado rojo, negro y fuego o atigrado negro.

Comportamiento de la raza Pastor Catalán

El Pastor catalán es un perro amigable y respetuoso con los niños, gracias a su sociabilidad y docilidad. Es inteligente y le gusta tanto aprender como obedecer, lo que lo convierte en un buen alumno y da la oportunidad de educarlo en obediencia básica. No podemos olvidar sus orígenes como perro de trabajo, al que hay que estimular tanto física como mentalmente.

Mantiene su instinto de pastoreo. Es vivaz, de alta energía, lo que implica que va a necesitar que le ofrezcamos oportunidades para quemarla. Eso sí, la gran actividad que despliega fuera de casa contrasta con la tranquilidad con la que se comporta en el interior del hogar. Otro aspecto positivo es su facilidad de adaptación a distintos entornos, familias y modos de vida.

Como contrapartida, algunos ejemplares, sobre todo machos, tienen tendencia a mostrarse independientes. Son reservados con los desconocidos y pueden actuar como buenos guardianes, alertando con sus ladridos de la presencia de intrusos. Si no están socializados pueden ser miedosos o agresivos. Son equilibrados y muy fieles y cariñosos con su familia.

Pastor-catalán-tumbado-sobre-el-cesped

Cuidados básicos recomendados

Es una raza que se ha adaptado a la vida en la ciudad, pero no es apta para personas sedentarias. Soporta temperaturas frías. Al tratarse de un perro con un alto nivel de energía, es fundamental que lo ejercitemos a diario. De lo contrario podrían surgir problemas de conducta. Además de paseos, mínimo tres al día, es conveniente practicar con él deporte.

Un ejemplo es el agility o el canicross, donde desarrollará actividad física, mental y obediencia. El senderismo y las excursiones serán de su agrado. Es importante que juegue sin correa al menos unos minutos al día. Para asegurarnos de que es posible soltarlo y que obedezca es imprescindible que hayamos invertido tiempo en sociabilizarlo y educarlo.

Si nos decidimos a convivir con un Pastor catalán debemos saber que hay que destinar tiempo a cepillarlo. Requiere cuidados frecuentes para evitar enredos, nudos y eliminar la suciedad que se haya quedado adherida. Como el pelo le suele tapar los ojos, puede ser necesario recortárselo periódicamente. También debemos vigilar la higiene de sus barbas.

Principales problemas de salud

El Pastor catalán es un perro que, en general, manifiesta una excelente salud. Únicamente podemos resaltar que sí se ha percibido, en algunas líneas, una propensión a la displasia de cadera.

En cuanto al aspecto psicológico, al tratarse de un perro de trabajo muy inteligente y de alta energía, si carece de toda la estimulación que necesita podrían surgir problemas de comportamiento.