Parte de la realeza, de grandes escritores y de muchos corazones españoles. El Lebrel Escocés es una de las razas de perro más conocidas en Europa, tanto por su historia como por sus habilidades para la caza de ciervos.

De hecho, en España es bastante conocido y puedes llegar a encontrártelo a menudo. Por ello, aquí te contamos todo lo que no sabías y debes conocer de este querido perro y sus orígenes.

Origen del Lebrel Escocés

El Lebrel Escocés, también conocido como Deerhound, es una raza de perro originaria de Escocia. Se cree que esta raza tiene una historia muy antigua, ya que se han encontrado representaciones de perros similares en el arte celta y romano.

Los primeros registros escritos de la raza datan del siglo XVI, cuando se utilizaban para cazar ciervos y otros animales de caza mayor en los terrenos de los clanes escoceses. Durante este tiempo, la raza era conocida como el Deerhound escocés, ya que se utilizaba específicamente para la caza de ciervos.

A lo largo de los siglos, la raza se ha ido refinando y seleccionando cuidadosamente para mantener su capacidad de caza y también para mejorar su apariencia física. En la década de 1800, la raza fue oficialmente reconocida y se establecieron estándares para su apariencia y temperamento.

Hoy en día, el Lebrel Escocés es un perro muy popular en todo el mundo como mascota y también como perro de exhibición y de caza.

Lebrel Escocés junto a un perro de raza pequeña
Lebrel Escocés junto a un perro de raza pequeña

Su reconocimiento oficial en el Kennel Club

Como bien hemos comentado, el Lebrel Escocés fue oficialmente reconocido como raza en la década de 1800. Más concretamente, fue reconocido por el Kennel Club de Reino Unido en 1879, convirtiéndose en una de las razas más antiguas y veneradas de la organización.

Desde entonces, la raza ha sido reconocida por muchos otros clubes caninos y organizaciones de todo el mundo, incluyendo la Federación Cinológica Internacional (FCI), el American Kennel Club (AKC) y el Canadian Kennel Club (CKC).

El reconocimiento oficial de la raza ha ayudado a establecer los estándares de la raza y garantizar que los criadores trabajen para mantener las características físicas y de temperamento de la raza, lo que ha permitido que el Lebrel Escocés siga siendo una raza reconocida y valorada hoy en día.

La fama del Lebrel Escocés en España

El Lebrel Escocés es una raza de perro que también ha ganado popularidad en España. Aunque no es una de las razas más comunes en el país, hay varios criadores y propietarios de Lebreles Escoceses en España que están activos en el mundo de la exhibición y la cría de perros.

En España, la raza está reconocida por la Real Sociedad Canina de España (RSCE), que es el organismo responsable de la gestión de las razas caninas en España. La RSCE establece los estándares de la raza y es responsable de la organización de las exposiciones caninas en el país, incluyendo la Exposición Internacional Canina de Madrid, que es una de las exposiciones caninas más grandes de Europa.

Los propietarios españoles de Lebreles Escoceses disfrutan de la elegancia y nobleza de la raza, y los entrenan y exhiben en competiciones de conformación y también en eventos de caza y seguimiento. Además, muchos propietarios de Lebreles Escoceses valoran el carácter tranquilo y afectuoso de la raza, lo que los convierte en mascotas populares y compañeros leales en nuestro país.

El Lebrel Escocés y su paso por la realeza

Al igual que ya hemos comentado en otras ocasiones, existen ciertas razas de perros que han tenido el privilegio de pasar por las manos de grandes aristócratas, realeza o celebridades.

En este caso, el Lebrel Escocés fue un perro muy valorado por la realeza y la aristocracia escocesas en el pasado. De hecho, se dice que María, Reina de Escocia, era una gran admiradora de la raza y tenía varios Lebreles Escoceses como mascotas.

Pero por si fuera poco, se sabe que Sir Walter Scott, el famoso escritor y poeta escocés, era un gran admirador de la raza y los mencionaba en varias de sus obras literarias. También se dice que la reina Victoria era una fanática de los Lebreles Escoceses y que tenía varios de ellos como mascotas en su residencia de Balmoral, en Escocia.