Maxi Adult es un alimento Súper Premium especialmente formulado para perros adultos de razas grandes. Fórmula equilibrada para un mantenimiento alto. Contiene una excelente combinación de proteínas de alta calidad fácilmente digeribles. Proteínas de fuentes combinadas, con pescado, carne y huevo. Incorpora arroz integral como fuente de carbohidratos, altamente digerible y de lenta asimilación que garantiza energía prolongada.
Elevado contenido de Condroprotectores para el máximo cuidado de sus articulaciones, L-carnitina para un aprovechamiento optimo de la grasa y Taurina para cuidar la salud de su corazón.
Tamaño de croqueta adaptado a pesos superiores a 23 kgs que promueve la reducción de sarro.
Diseñado para perros adultos de razas grandes y muy grandes.
Sabor: Pollo y pescado.
Tamaño de croqueta: 70/100
Transición: de 2 a 4 días
INGREDIENTES
Carne de pollo deshidratada y pescado azul deshidratado (min 30%) , arroz integral 22%, grasa de pollo, huevo entero deshidratado, proteína vegetal, aceite de pescado rico en omega 3, levadura de cerveza, fructooligosacáridos, mananooligosacáridos, glucosamina, condroitina, probióticos, prebióticos, hortaliza, bifidobacterias, yuca, levadura de cerveza, alfatocoferoles, aromas naturales, antioxidantes naturales.
COMPONENTES ANALÍTICOS
Proteína Bruta: 32%, Grasas brutas: 19 %, Fibras brutas: 2 %, Cenizas brutas: 6,4 %, Calcio: 1,3 %, Fósforo: 1,1 %, Potasio: 0,6 %, Omega 6: 2,2 %, Omega 3: 1,4 %.
Energía Metabolizable: 4130 kcal
Vitaminas (UI) y aditivos nutricionales (por kg):
Vitamina A: 23000 UI, Vitamina D-3: 1500 UI, Vitamina E: 600 mg, Condroitina + glucosamina: 2150 mg , L- carnitina: 60 mg, Taurina: 1000 mg
MODO DE EMPLEO
RECOMENDACIONES
No dejar la comida a la libre disposición del perro. Ofrecer por tomas y esperar 10 minutos y si no la ha terminado retirarla hasta la próxima toma. Debemos ser nosotros los que ajustemos su dosis y no el propio perro, ya que esta segunda opción, en la mayoría de los casos derivará en no aportar las dosis correctas(con riesgo de soprepeso o déficit nutricional y calórico), o correr riesgos de torsión de estómago o indigestiones, o en que el perro pierda interés en la alimentación que realmente le aporta todo lo que necesita, «exigiendo» cambios a comida casera, y desequilibrando de esa forma su aporte nutricional correcto.
Por otro lado, gestionando nosotros su comida conseguiremos que ante una patología que curse con falta de apetito, seamos conscientes de ello con prontitud, y nos permita poner los medios oportunos a tiempo de no empeorar.
Otro beneficio sin duda, es que el perro valorará la comida, y nos permitirá recompensarle de esa forma por comportamientos que nos interese generalizar.
Dejar siempre un cuenco con agua fresca y limpia a disposición del perro.
Mantener el saco en un lugar fresco y seco.