El magnífico Leopardo de Catahoula

El Leopardo de Catahoula recibe su nombre por el aspecto moteado característico de su manto. Es un perro americano que se dedicaba a la caza y al pastoreo. Fuerte, dominante y activo, requiere un cuidador experimentado.

Datos básicos

Historia del perro Leopardo de Catahoula

Se trata de un perro espectacular procedente de los Estados Unidos. En concreto de los territorios más profundos del sur del país, en una parroquia al noreste de Louisiana, que es la que le da nombre. Se data su origen en el siglo XVIII, aunque otras fuentes lo adelantan al XVI, por lo que todavía quedan incógnitas en cuanto a su surgimiento.

Sus funciones eran la caza de ciervos y el pastoreo para ayudar a reunir tanto cerdos salvajes como ganado que, en ocasiones, se escapaba hacia bosques y pantanos. Sus métodos para recuperarlos eran poco delicados, ya que los perseguía y se peleaba con ellos. También se encargaba, en menor medida, de rastrear y expulsar mapaches.

Probablemente es descendiente de perros de guerra que llevaron al continente los españoles y que se cruzaron con perros nativos americanos de la zona. Hoy en día continúa encontrándose como perro pastor, pero también ha conseguido convertirse en un apreciado perro de compañía, aunque es raro encontrarlo fuera de los Estados Unidos.

Características del perro Leopardo de Catahoula

Son perros de talla grande y cuerpo alargado y bien musculado. La cabeza es grande, de cráneo ancho y algo aplanado. La trufa puede presentarse en diferentes tonalidades. Las orejas suelen ser cortas. Los ojos, medianos y redondos, también admiten distintos colores. El pecho es profundo, lo que contribuye a una buena capacidad cardíaca y pulmonar.

Las patas son largas, sólidas y fuertes. La cola es de inserción baja. El manto es de una sola capa, corto, liso, grueso y pegado al cuerpo. Se encuentra en color mirlo o en negro y fuego. Pero lo más interesante es la característica que lo hace inconfundible: el nombre de leopardo se debe a las manchas moteadas de su capa, que evocan las de este animal.

Aun así, hay ejemplares de color sólido, es decir, sin las típicas manchas de leopardo. La raza todavía no ha sido reconocida por la Federación Cinológica Internacional, ya que presenta variaciones en diferentes rasgos como la cola o las orejas. Esto quiere decir que es posible encontrar ejemplares bastante distintos, incluso aunque se trate de hermanos de camada.

Carácter del perro Catahoula

Los Leopardo de Catahoula destacan por su carácter dominante, enérgico y fuerte, lo que puede ocasionar problemas de convivencia si cae en manos de personas sin conocimientos suficientes para su correcto manejo. Además, son ágiles, flexibles y resistentes. No es la raza más adecuada para la convivencia con niños ni siempre acepta la compañía de otros perros.

De todas formas, este aspecto depende mucho de la socialización que reciba, así como de la educación que le ofrezcamos. No es especialmente fácil de educar, por lo que debemos esmerarnos para conseguir un buen entrenamiento y una adecuada socialización que evite problemas de conducta. Si tenemos duda a este respecto, acudiremos a un profesional.

Además, son perros activos e inteligentes que van a necesitar un elevado nivel de actividad física y de estimulación mental para su bienestar. Un Leopardo de Catahoula con sus necesidades cubiertas será un excelente y fiel compañero. Es muy protector y buen guardián. Defenderá a todo aquel que considere de su familia y sus propiedades.

El hogar del Leopardo de Catahoula

Los apartamentos no son el hogar recomendado para los Leopardo de Catahoula, ya que son perros activos que necesitan disponer de espacio y de posibilidades para realizar todo el ejercicio indispensable para agotar su gran energía. Se recomiendan paseos de larga duración, juegos como el de la pelota o los de inteligencia, carreras, excursiones, etc.

Cualquier itinerario por espacios naturales es una actividad que tienen que ser rutina para esta raza. Además, puede practicar agility. Estarán más felices en casas donde puedan encargarse de alguna tarea, como la vigilancia. Tienen preferencia por climas soleados. Dado sus antecedentes como perros de caza y pastoreo, están adaptados a la vida en el exterior.

Es muy importante educarlos y vigilar las interacciones con desconocidos. De lo contrario, su acentuado instinto de protección, su dominancia y su territorialidad podría llevar a que se mostrase incluso agresivo. Por último, su manto requiere cepillados regulares, sobre todo en la época de muda.

Salud y cuidados para el Leopardo de Catahoula

La raza puede presentar alteraciones de la salud, sobre todo derivadas de su talla grande. Un ejemplo es la displasia de cadera o la torsión de estómago. Además, un Leopardo de Catahoula que no recibe toda la estimulación que necesita acabará estresándose.

El estrés se manifestará a través de problemas de conducta como la ansiedad o la destructividad. Son problemas solucionables cambiando los hábitos de vida, pero los casos más graves tendrán que ser puestos en manos de profesionales del comportamiento canino o etólogos.