El Kangal es un perro de origen turco, muy conocido en su país de procedencia. Encargado de la defensa de los rebaños de ovejas frente a los depredadores, posee un carácter fuerte e independiente que requiere de un cuidador con conocimientos para educarlo.

Datos básicos

  • Peso: 48-60 kg en los machos y 40-50 en las hembras.
  • Altura: 72-78 cm en los machos y 65-73 en las hembras.
  • Esperanza de vida: 10-11 años.
  • Ideales para: personas con experiencia en el manejo de perros.

Origen de la raza Kangal

El origen de esta raza se encuentra en Turquía, donde es raza nacional. Sus orígenes se remontan a la Edad Media. Fue diseñado para perro pastor, tarea que ha sobrevivido hasta la actualidad. La particularidad es que los pastores turcos no utilizaban estos perros para pastorear ovejas, sino solo para protegerlas ante la presencia de depredadores como lobos.

Se le conoce con otros nombres como Coban Kopegui, Karabas o Perro pastor de Anatolia. Hace unos 1000 años, expediciones de habla turca llegaron a Asia Menor o Anatolia y ocuparon la zona que hoy se conoce con el nombre de Turquía. Llevaban con ellos a sus perros, que eran de tamaño grande y se encargaban de guardar los rebaños.

El Kagal es el descendiente de estos ejemplares. A todos los perros de la zona con similares características se les denominó Coban Kopegui. Pero, ya en el año 1970, los criadores se percataron de que había diferencias regionales.

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Características físicas del Kangal

El Kangal es un perro considerablemente grande y robusto, de tipo moloso. Las orejas son oscuras, de forma triangular y las eleva cuando está en alerta. Se redondean en la punta. Los ojos tienen una forma almendrada y son de color castaño. Los labios son de color negro y cuelgan ligeramente. La trufa también es negra.

Destaca su cuello grueso y musculoso. Las patas delanteras son anchas, a la vez que largas y gruesas. Los pies son fuertes y tienen los dedos bien arqueados, con uñas cortas y negras. Las almohadillas son gruesas.

La cola es larga, más que el corvejón. La lleva baja salvo cuando está en alerta. Entonces se curva sobre la espalda. Su manto, grueso y de longitud media, unos 3-7 cm, puede ser de una gran variedad de colores. Destaca la máscara negra sobre un cuerpo color arena. Presenta una capa corta y densa y una interna gruesa.

¿Cómo debe ser un perro Kangal?

El estándar de la raza que marca la Federación Canina Internacional delimita perfectamente algunas características y proporciones. Así, la longitud del cuerpo debe ser un 10-12 % más larga que la altura medida a la cruz. Por su parte, la profundidad del pecho es, aproximadamente, el 50 % de esta altura.

El cráneo es ancho entre las orejas y se afina hacia el stop. Es más largo que ancho, de stop ligero. El hocico supone el 40-44 % del largo de la cabeza. Se prefiere la mordida en tijera, pero se acepta en tijera invertida. Los ojos, medianos o grandes, no muestran la conjuntiva. Se prefieren en castaño oscuro. La longitud del cuello es igual a la de la cabeza.

La grupa aparece levemente más alta que la cruz prominente. El pecho desciende hasta la línea de los codos. El vientre esta ligeramente recogido. Se aceptan espolones. La longitud del manto puede variar según la climatología. Es más largo y denso en cuello, hombros y muslos. Debe ser monocolor, aunque se admite blanco en el pecho y en la punta de la cola.

¿Cómo es el temperamento de un Kangal?

El Kagal destaca por poseer un carácter fuerte e independiente. No es especialmente apto para la convivencia con los niños. Tampoco destaca por ser sencillo de educar, por lo que se requiere paciencia, constancia y coherencia. A ningún perro le puede faltar la educación básica en obediencia ni la socialización.

Mucho menos si adoptamos a un perro de tan grandes dimensiones y temperamento fuerte. Una desobediencia o indisciplina puede tener graves consecuencias. Por eso se recomienda para cuidadores con experiencia en perros de gran tamaño y fuerza para su manejo y contención, de ser el caso.

Con otros perros puede tener relaciones tensas, otra razón para educarlo bien. De todas maneras, con el manejo adecuado se pueden superar estos inconvenientes y conseguir un perro adecuado para un entorno familiar. Si se logra obtendremos un perro leal y cariñoso, aunque se mantenga cauto con los extraños. Como rasgo positivo, no es un perro agresivo.

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Cuidados básicos de la raza

La ciudad no es el mejor ambiente para estos perros ni las casas de tamaño pequeño. Puede vivir en el exterior y es capaz de soportar sin ningún problema temperaturas bajas. De la misma manera, resiste las altas temperaturas.

Hay que tener cuidado si lo soltamos porque alcanza una velocidad considerable. Antes de permitirle correr suelto debemos tener la seguridad de que nos va a obedecer. Es imprescindible que se mantenga activo y pueda quemar su energía. Su pelo no necesita muchos cuidados.

Cómo alimentar a un Kangal

Debido a su gran tamaño y rápido crecimiento, debemos usar piensos súper premium elaborados con ingredientes de alta calidad. Que les faciliten todos los nutrientes que van a necesitar para un correcto desarrollo.

A partir de los dos meses de edad podemos comenzar a alimentarlo con Puppy Gourmet, pasando a Maxi Junior al cumplir los seis meses de edad, por tener el tamaño de la croqueta más grande.

A partir de los catorce o dieciseis meses de vida podemos pasar a Maxi Adult o a Large Breed, ambos son piensos súper premium elaborados específicamente para perros adultos de gran tamaño. Muy nutritivos, variados y palatables. Además Large Breed contiene un extra en condroprotectores para cuidar de sus articulaciones.

Principales problemas de salud

Estamos ante un perro de trabajo que, si no recibe los suficientes estímulos ni realiza la actividad física que requiere, puede mostrar trastornos de comportamiento por estrés, ansiedad o aburrimiento. En estos ejemplares es común la destrucción de objetos y los ladridos excesivos.

En cuanto a la salud física, son perros resistentes que no suelen enfermar ni se les conoce predisposición a padacer patologías concretas. Por señalar algún punto de atención, hay que vigilar el sobrepeso y la displasia de cadera.