Ambos son perros pastores, pero eso no quiere decir que no existan diferencias entre el Pastor holandés y el mucho más popular Pastor alemán, sobre todo en el físico y, como es evidente, en el origen.

El Pastor holandés o Dutch shepherd

En primer lugar, para poder apreciar las diferencias entre ambas razas es importante tener claras las características básicas que permiten definir a cada uno de estos perros pastores. Comenzaremos por presentar al Pastor holandés, ya que se trata de una raza mucho menos conocida. Es fundamental saber que es considerado un perro de trabajo.

Esto implica, además de excelentes cualidades e inteligencia, la necesidad de realizar una actividad física intensa y de recibir una buena estimulación a nivel mental. Son perros con mucha energía, incansables y juguetones. Desarrollan un gran apego hacia su cuidador y puede ser buenos con los niños.

En cuanto al tamaño, son perros de talla mediana-grande que pueden superar los 30 kg de peso. Sufren problemas de salud que se relacionan con este tamaño, como los relacionados con las articulaciones. Su esperanza de vida es de unos 11-14 años. Su manto es corto, largo o duro. No abundan fuera de su país de origen.

La raza Pastor alemán

El Pastor alemán es un perro de sobra conocido gracias a su extensión a nivel mundial, sobre todo por sus cualidades para el trabajo. Seguridad, asistencia, defensa, rescate o compañía, nada se le resiste a este perro que destaca por su inteligencia y su capacidad de aprendizaje, lo que lo convierte en un excelente alumno.

Pero también condiciona su mantenimiento, ya que va a necesitar un cuidador con conocimientos que pueda proporcionarle estímulos tanto a nivel físico como psicológico. Puede participar en actividades como el agility y también destacan sus cualidades como guardián. Es protector con su familia y muy activo. Necesita salidas al aire libre regulares.

En cuanto a su aspecto, son perros grandes y lobunos. Solemos pensar en el Pastor alemán negro y fuego, pero hay más variedades de color y de longitud del manto. La displasia de cadera es un problema para esta raza, pero hay otras patologías a tener en cuenta, como las que afectan a la piel o al sistema digestivo. Su esperanza de vida es de unos 12-13 años.

Origen e historia

La primera diferencia entre el Pastor holandés y el Pastor alemán está, como su nombre nos indica, en su lugar de origen. El Pastor holandés se crió en los Países Bajos con el objetivo de ayudar en las granjas de la zona. Se encargaba de colaborar en el manejo de animales como las ovejas y las gallinas y, además, vigilaba la propiedad.

El Pastor alemán comenzó a criarse de forma planificada a partir de perros de pastoreo que se encontraban en el centro y en el sur de Alemania. El objetivo de sus criadores era conseguir un perro de trabajo del más alto nivel.

Aspecto físico

Ambos son perros de talla media-grande. A la cruz sus dimensiones son similares. El Pastor holandés mide entre 55-62 cm, por los 55-65 del Pastor alemán. En el peso sí se percibe más diferencia, siendo más pesado el Pastor alemán, con unos 30-40 kg de media. El Pastor holandés se queda en unos 29,5-30,5.

Además, el Pastor holandés se encuentra en tres variedades según las características del manto. Este puede ser corto, largo o duro. En este último caso sería muy sencillo distinguirlo del Pastor alemán, ya que este no dispone de un pelo de esta textura. Sus variedades, en cambio, son de pelo corto y de pelo largo.

El pelo duro del Pastor holandés no solo lo diferencia claramente del Pastor alemán, sino que lo hace inconfundible, pues no es la textura que normalmente asociamos a los perros pastores. Además, requiere unos cuidados de peluquería específicos, ya que el pelo se recorta manualmente.

Colores del perro pastor

Un dato que nos permite diferenciar al Pastor holandés del alemán puede ser la coloración del pelaje. El Pastor holandés es atigrado con base dorada o plateada, con diferentes tonalidades que van desde el arena hasta el rojizo. El Pastor alemán ofrece mayor variedad al poder ser negro y fuego, marrón y amarillo, gris o negro.

La cabeza del perro pastor

Tanto el Pastor holandés como el alemán disponen de una cabeza en forma de cuña. Aunque cuando el Pastor holandés es de pelo duro, da la sensación de tener una estructura más cuadrada, pero solo es por el tipo de pelo. En cualquier caso, sí es más alargada en el Pastor holandés y un poco menos compacta.

El resto del cuerpo es bastante parecido entre ambos perros, aunque se aprecian algunas diferencias. Un ejemplo es la forma de los pies, ovalados en el Pastor holandés y más redondeados en el alemán.

Perros para niños

La buena convivencia de estos perros con los más pequeños de la casa dependerá mucho del comportamiento de los niños y de que el perro haya recibido una correcta socialización, además de educación. Dicho esto, el Pastor holandés se considera más tendente a establecer relación con los niños.

En cualquier caso, es básico vigilar estas interacciones. A pesar del éxito mundial del Pastor alemán, o precisamente por eso, es de las razas que más mordeduras protagoniza cada año. También influye su cría indiscriminada, cuyo resultado son ejemplares más inestables, nerviosos, etc.