Puede que en nuestro país no sea muy conocido y quizá lo hayas confundido a menudo con el Caniche, pero lo cierto es que el Barbet es una de las razas de perros más solicitadas en Francia por sus grandes habilidades en el agua.

Inteligente, capaz, protectora y singular. Un perro único, diferente y, aunque parecido físicamente al Caniche, muy especial. Si todavía no conocías todos los datos sobre esta raza tan admirada por grandes reyes de la aristocracia, no te lo pierdas y sigue leyendo su historia y origen que te mostramos aquí.

¿De donde es originario el Barbet?

Debido a la existencia de diferentes teorías, al igual que sucede con numerosas razas de perros, la historia del Barbet no está del todo muy clara. Sin embargo, la que cobra mayor fuerza es la de inicios de la raza en Francia, donde se estima que fue utilizado como un perro de caza en ríos y pantanos, adoptándose como “perro de agua francés” que lo distinguía del resto.

El Barbet es una de las razas de perros más antiguas que existen, ya que su origen está datado alrededor del siglo XVI, aunque no se dio a conocer verdaderamente y cogió un gran revuelo y auge hasta que el rey Enrique IV lo adoptó en su hogar como parte de la familia real.

Pero aún así, el Barbet tuvo un mayor aumento de demanda sobre 1880 cuando fue reconocido con el nombre que actualmente tiene, siendo en francés “Barbet” el significado de la palabra “barba”.

cachorros de perro de raza Barbet

La historia que envuelve a las pinturas de los pantanos

A pesar de que en los pantanos el clima es bastante frío y en la actualidad no mucha gente suele pisarlos, lo cierto es que gracias al Barbet, la tendencia hace siglos era la de pasar el día allí, ya que a esta raza de perro le encanta el agua (de ahí que fuese denominado como “perro de agua francés”) y pasaba la mayor parte del tiempo en zonas pantanosas.

De hecho, para confirmar estos momentos, se han encontrado numerosas pinturas de estos perros al lado de pantanos, donde se aprecian a personas jugando con ellos, demostrando la felicidad que sentían en esos lugares gracias al Barbet a pesar de los climas fríos.

Y es que, como bien hemos podido comprobar en la historia, cuando algo queda grabado en pinturas, ya sea en cuadros o en este caso, en las piedras que rodean a los pantanos, es porque realmente fue un momento importante y querían que perdurase para siempre.

El Barbet, a punto de la extinción tras la Segunda Guerra Mundial

Como ha sucedido con muchas otras razas de perros, a pesar de su popularidad las ventas del Barbet cayeron en picado tras la Segunda Guerra Mundial, llegando a estar incluso en evidente peligro de extinción.

No obstante, gracias a los conocedores de sus habilidades, en este caso, hubo tres expertos dedicados a la cría de estos canes que consiguieron mantener con vida la especie y, posteriormente, darle una mayor repercusión con la promoción de la cría de esta especie.

Tras ello, se ha conseguido que hoy en día sean reconocidos de forma extraordinaria, resaltando sobre todo sus habilidades como excelentes nadadores, cazadores, perros de pastoreo e incluso de compañía.

El reconocimiento oficial del Barbet, la clave para diferenciarlo del Caniche

Lo cierto es que, a pesar de que el Barbet es bastante famoso en Francia, todavía se sigue confundiendo con el Caniche, tanto en el país como por otras partes de Europa. Aunque aún a día de hoy suele haber esta confusión, desde 2005 hay una cantidad menor de personas que no los distinguen, ya que en ese año fue reconocido por el United Kennel Club.

Por otro lado, en 2006, la Federación Cinológica Internacional reconoció su estándar oficial, explicando en los documentos ciertas características que lo diferenciaban claramente del Caniche. Por lo que, de este modo, los amantes y aficionados del Barbet pueden estar más contentos ya que, ahora los criaderos van a aportar una mayor cantidad de esta raza a la sociedad.

Y es que, gracias a este reconocimiento se le pudo comenzar a diferenciar mucho más fácilmente de la raza Caniche, a pesar de que su tamaño y habilidades no son las mismas.