El Foxhound inglés es una raza de caza de tamaño grande que a día de hoy se ha hecho un hueco en los hogares como perro de compañía. Si puede realizar suficiente actividad física, en el hogar disfrutaremos de un perro tranquilo y equilibrado.

Datos básicos

  • Peso: 25-34 kg.
  • Altura: 58-69 cm.
  • Esperanza de vida: 11-13 años.
  • Ideales para: hogares que le puedan dedicar tiempo y ejercicio.

Historia del Foxhound inglés

Como bien nos indica su nombre, la raza surgió en el Reino Unido, donde es muy conocida. Se cree que data del siglo XV. Era un perro sabueso destinado a la caza del zorro, actividad muy popular en el país desde entonces y en la que sigue participando hoy en día.

Para este tipo de caza se buscaban perros con características concretas. Se pedían ejemplares muy veloces, con un buen y sonoro ladrido y un gran olfato. El Foxhound se desarrolló a partir de estas premisas, mezclando sabuesos ingleses con los procedentes de Francia.

Se cree que entre sus antecesores están el Bloodhound o el galgo inglés. Destaca sobre todo por su gran capacidad olfativa, lo que ha propiciado su extensión fuera del Reino Unido. En la actualidad, pocos ejemplares de Foxhound inglés viven como perros de compañía.

Características de la raza Foxhound inglés

El Foxhound inglés es un perro de caza de tamaño mediano-grande y de constitución robusta, a la vez que estilizada y atlética. Es musculado, poderoso y bien proporcionado. Tiene el cráneo algo aplanado y de stop poco marcado. El hocico es cuadrado y recto.

Los ojos son grandes y se disponen bien separados. Son de color avellana o pardo. Las orejas son largas, caídas y de inserción alta. Posee un lomo ancho. El pecho destaca por su profundidad y su aspecto robusto. Tiene las costillas bien arqueadas. Las patas delanteras son gruesas y rectas.

Las traseras son musculosas y potentes, aptas para el ejercicio. La cola la lleva ligeramente curvada, pero no enroscada. Es de inserción alta. La coloración de su manto puede ser tanto bicolor como tricolor. El pelaje es corto, fino y liso, además de impermeable.

Temperamento del enérgico Foxhound inglés

En el carácter del Foxhound destaca su buena actitud con otros perros, ya desde sus inicios en los que convivía con muchos otros congéneres. Es muy sociable. Con las personas también resulta un compañero excelente, dócil y amigable. Mantiene una actitud alerta. No es un perro guardián pero puede funcionar como tal gracias a su potente ladrido.

El Foxhound inglés es un perro amable, gentil, cariñoso, equilibrado y tranquilo. Pero hay que tener en cuenta que no siempre es sencillo educarlo, de ahí que se necesite tiempo y paciencia para obtener buenos resultados y potenciar el vínculo seguro animal-humano. Otra desventaja es su tendencia a perseguir y cazar cualquier animal del tamaño del zorro.

Hay que extremar las precauciones y proporcionarle una buena socialización, lo más temprana posible, para evitar disgustos. Si esta se realiza correctamente, podría convivir con otras especies. Son perros activos y dinámicos que, por lo tanto, necesitan actividad física, ya que poseen una alta energía. Son fieles con su familia y necesitan mucho de su compañía.

Los mejores cuidados para el Foxhound inglés

No es una raza especialmente indicada para la vida en un apartamento, ya que necesita espacio para ejercitarse. Vivirán mejor, por lo tanto, en una casa en la que dispongan de terreno. Son perros muy activos y amantes del ejercicio. Por ello disfrutan de excursiones y actividades deportivas. Es imprescindible que salgan a pasear un mínimo de tres veces al día.

Mejor si incluimos con frecuencia momentos de juego y carreras en los que estén sueltos en un espacio controlado. Aprovechando su olfato podemos esconder distintos objetos para que los encuentren siguiendo el rastro. Estos juegos les resultarán muy interesantes. Es muy importante invertir tiempo en educación para poder soltarlo con garantías.

Son candidatos a practicar deportes caninos como el agility. A pesar de su manto corto, soportan bien las bajas temperaturas, con lo que podrían vivir en el exterior. Estarán más a gusto en climas templados. Otra ventaja es que su pelaje apenas necesita cuidados. Podemos cepillarlos de vez en cuando, sobre todo para ayudarles a eliminar el pelo muerto.

Conoce la salud del Foxhound inglés

En general se trata de una raza bastante sana en cuanto a enfermedades se refiere. Pero sí hay que cuidarlo a nivel emocional. Si nuestro Foxhound inglés no practica todo el ejercicio que necesita, va a verse frustrado y estresado. Lo mismo sucede si lo dejamos solo durante espacios de tiempo prolongados.

Esta situación lleva a la aparición de trastornos del comportamiento que se manifiestan como conductas destructivas, ladridos, eliminaciones inadecuadas, cuadros de ansiedad por separación, etc. El ladrido en esta raza puede ser especialmente potente y, además, tienen tendencia a ladrar en exceso.

Por lo tanto, es tan importante cuidar su salud psicológica como la física. Los problemas de comportamiento pueden ser resueltos por un veterinario especializado en conducta canina o por un etólogo.