El Fila brasileiro también se conoce con el nombre de Mastín brasileño o, en portugués, Cão de Fila. Posee excelentes habilidades para el rastreo y la vigilancia de propiedades. Además, destaca su aspecto poderoso.

Datos básicos

  • Altura: 61-76 cm, siendo las hembras algo más pequeñas.
  • Peso: 41-50 kg, con las hembras un poco menos pesadas.
  • Esperanza de vida: 10-12 años.
  • Ideales para: personas experimentadas, ya que es considerado un perro potencialmente peligroso.

Historia y origen de la raza Fila Brasileiro

Como no podría ser de otra manera, su nombre nos indica que su país de origen es Brasil. Se data su aparición en el siglo XIX.  Era un perro empleado para el rastreo, el control del ganado y la caza mayor. El Fila brasileiro no saltaba sobre la pesa, sino que la controlaba hasta la llegada del cazador.

Desgraciadamente, esta capacidad, unida a su extraordinaria habilidad para el rastreo, fue utilizada por los terratenientes para perseguir y recuperar a esclavos que pretendían huir. Hoy en día estas funciones han quedado atrás y, básicamente, nos lo encontramos como perro de compañía o en labores de seguridad, vigilando propiedades.

Es una de las dos razas que se consideran nativas de Brasil y la más conocida. La otra es más rara y se trata de un perro rastreador. El Fila brasileiro parece que se origina gracias a la aportación de mastines y sabuesos procedentes de España y de Portugal. Debido a sus aptitudes, la raza salió de Brasil y se extendió por América del Norte y Europa.

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Características físicas del Fila Brasileiro

Es un perro de tamaño grande o gigante, robusto, compacto y proporcionado. Su aspecto es imponente, fuerte y musculoso. La cabeza es ancha y maciza. Destaca su cuello, también muy ancho y en el que se forma papada. El pecho se localiza muy bajo. Sus ojos son medianos y almendrados. Los párpados tienden a colgar, igual que los labios.

Esto favorece que pierdan saliva por las comisuras. De los sabuesos que forman parte de sus ancestros ha heredado características como el hocico alargado y fuerte o la piel colgante. Su mordida es poderosa. Se considera que es un perro de los que, cuando muerden, no sueltan. Las orejas son colgantes, gruesas y en forma de uve.

El pelaje es denso, corto, brillante y suave. Acepta variedad de colores con leonados oscuros, claros, amarillos o rojizos. Hay ejemplares con varias tonalidades o un único color. La cara puede ser más oscura. Se aceptan manchas blancas sobre el pecho, la cola o los pies. Llama la atención su forma de andar. Mueve las patas del mismo lado a la vez.

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Temperamento de la raza

Su carácter no es el más compatible para la convivencia con niños, por lo que esta debe evitarse o, al menos, supervisarse exhaustivamente. Tampoco es para personas sin ninguna experiencia en el manejo de perros. Es un buen guardián. No es ladrador, pero alerta en cuanto detecta la presencia de un intruso o algún ruido extraño.

Su aspecto ayuda a desalentar la entrada de cualquier desconocido. Pese a su físico, en general, es un perro amable con los miembros de su familia. Con ellos será dócil, tranquilo, muy leal y obediente.

Llega a desarrollar un gran instinto de protección del hogar. Esto ayuda a que se muestre desconfiado con los extraños e incluso agresivo. Gracias a la sangre de sabuesos que posee resulta un gran rastreador. Es un perro determinado y valiente.

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Cuidados básicos para un Fila Brasileiro

La ciudad no está hecha para él, por lo que es mejor no mantenerlo en un apartamento. Requiere espacio y posibilidades de realizar ejercicio y paseos largos. Aunque su pelo es corto, soporta temperaturas tanto cálidas como gélidas. Esto lo hace candidato a vivir en el exterior, siempre con una buena caseta o espacio donde resguardarse cuando lo necesite.

En cuanto a la higiene, la limpieza de las babas será nuestra mayor preocupación si queremos evitar que nos salpique a nosotros y a cualquier objeto que lo rodea. Su pelo corto no necesita más que cepillados de vez en cuando con un guante o una manopla. Es imprescindible que, si adoptamos un Fila brasileiro nos centremos en su educación.

Independientemente de su edad, esta es básica para su manejo. Debemos ser firmes en este punto. Necesita también una alimentación de calidad, especialmente durante su etapa de crecimiento. Hay que tener en cuenta los costes que supone cuidar de un perro de tan grandes dimensiones.

Principales problemas de salud

Es importante vigilar su peso, ya que tienen tendencia a engordar. El sobrepeso se relaciona con la aparición de enfermedades y el agravamiento de otras. Perjudica las articulaciones, lo que es causa de dolor y cojera. Además, es preferible ofrecerle la ración de alimento diaria en varias tomas. Con ello evitamos atracones que pueden acabar en torsión de estómago.

En cuanto al aspecto psicológico, no son perros para dejar aislados en un terreno. Es imprescindible que se relacionen y que establezcan un vínculo con sus cuidadores para evitar problemas de comportamiento.

Perros potencialmente peligrosos

Debido al tamaño del Fila brasileiro, sus características y su capacidad para provocar lesiones es una raza que se incluye en los listados de perros potencialmente peligrosos. Esto implica que su tenencia está regulada por la legislación.

Antes de adoptar uno de estos perros tenemos que informarnos de los requisitos en nuestra localidad de residencia. En general, se pide ser mayor de edad, un seguro de responsabilidad civil y la ausencia de antecedentes penales.

También hay que inscribirlo en el registro correspondiente. El Fila brasileiro deberá pasear con bozal y con una correa corta. Pertenecer a este grupo de perros limita su expansión en los hogares.