Desarrollados originalmente para la caza de aves, los Clumber Spaniel han evolucionado hasta convertirse en grandes compañeros domésticos. Sus deseos de complacer y su inteligencia natural facilitan su educación.

Otra de sus características es que se adaptan a tu estilo de vida, siempre y cuando no seas un deportista de élite. Te acompañarán en una caminata por el campo, en un paseo por el parque o pasando la tarde tranquilamente viendo una película. Conoce todo lo que los Cumber Spaniel tienen para ofrecerte en el siguiente artículo.

Datos básicos

  • Tamaño: entre 43 y 51 cm
  • Peso: entre 35 y 38,5  kilos
  • Esperanza de vida: entre 10 y 12 años
  • Ideales para: familias con niños, casas con jardín o pisos urbanos; caza de aves de intensidad moderada.

Orígenes del Clumber Spaniel

Los primeros registros de esta raza son del coto de caza conocido como Clumber Park, situado en el condado de Nottingham, Inglaterra. Esta área era propiedad del duque de Newcastle, un gran entusiasta de estos perros en el Reino Unido. Fue el guardabosque del parque, William Mansell, quien se encargó de su desarrollo y mejora.

Los Clumbers Spaniel fueron muy valorados por los terratenientes durante el siglo XIX, debido a sus dotes como cazadores de aves; también por su talante amable. De hecho, es habitual encontrarse a estos perros acompañando los retratos de los aristócratas en las pinturas costumbristas de la época.

Gracias a estos registros se puede observar que el estándar ha cambiado muy poco desde entonces. Pese a ser una de las primeras razas reconocidas por las federaciones internacionales, sigue siendo poco conocida por el público general.

Principales características del Clumber Spaniel

Los ejemplares de Clumber Spaniel se caracterizan por tener un cuerpo bajo y largo, con huesos grandes que le dan una apariencia corpulenta. Cuentan con un pecho poderoso, una espalda extensa y bien nivelada y unas patas cortas, rectas y poderosas, que le permiten moverse con seguridad entre la maleza. El cuello es largo, musculado y se inserta armónicamente en unos hombros poderosos.

Los Clumbers Spaniel poseen un cráneo chato y una cabeza maciza, en la que sobresale una frente gruesa con el ceño bien marcado. El hocico, ancho y profundo, está diseñado para no dejar escapar a sus presas. La trufa tiene una forma cuadrada y sombras que van del rosa al beige. Los ojos son grandes y de color ámbar oscuro; están rodeados por una zona de pelo rosado en forma de diamante. Las orejas, anchas y triangulares, se insertan a la altura de los ojos.

El manto de estos canes es muy denso, con un pelo recto y lacio que se siente suave al tacto. Las orejas están ligeramente cubiertas de una densa pelusilla o “plumaje”, más abundante en la zona del cuello, del vientre y en la parte trasera de las patas.  Los tonos más frecuentes son blancos con marcas de color limón o naranja en el rostro y en las orejas. También es habitual que presenten pecas en el hocico, en las patas o en la cola.

Temperamento de la raza Clumber Spaniel

Debido a su agradable temperamento, se recomienda su adopción a personas que buscan tener un primer perro o que tienen poca experiencia en la crianza. Este can tiene una dulzura innata y acostumbra a establecer muy buenas relaciones con quienes comparte su día a día. Sin embargo, un Clumber Spaniel siempre tendrá a su humano preferido.

Es, por tanto, una buena elección para familias con niños de cualquier edad. Les apasiona jugar, especialmente trayendo bolas o palos, aunque también se divierten con las carreras. Otra ventaja es que no tienden a atacar. Por el contrario, ante una situación que les perturbe preferirán alejarse. Con otros perros suelen llevarse muy bien, sobre todo si se han criado juntos. Sin embargo, debes tener un cuidado extra si tienes aves como mascotas, pues debido a su instinto natural pueden intentar cazarlas.

No es raro que adopten comportamientos destructivos – y no solo cuando están aburridos-. Les encanta mordisquear las cosas y, al tener unas mandíbulas poderosas, pueden romper con facilidad toda clase de juguetes. Procura poner los zapatos, los móviles y otros objetos valiosos fuera de su alcance. Son perros curiosos y tenaces; no te sorprendas si descubren cómo abrir un cajón, una estantería e incluso hasta la nevera.

Pero no te preocupes. Los Clumber Spaniel son fáciles de educar, aunque un poco cabezotas. La mejor manera de instruirles es a través de técnicas de refuerzo positivo que prioricen las recompensas como la comida y los halagos. Deberás ser constante para evitar su tendencia a morder objetos y a subirse donde no deben.

Cuidados que precisa un perro Clumber Spaniel

Los perros Clumber Spaniel suelen perder mucho pelo durante todo el año, lo que hace necesario al menos un cepillado diario. Su color blanco y su tendencia a escarbar entre la maleza no ayudan a mantenerles limpios. Además, babean mucho. Piénsatelo dos veces si eres un entusiasta de la limpieza.

Por otro lado, no son canes con grandes necesidades de ejercicio: será suficiente con 20 o 30 minutos al día. Una caminata tranquila o una sesión de juegos de intensidad moderada es lo ideal para que se mantengan equilibrados. A muchos ejemplares les encanta nadar y pueden desenvolverse muy bien en el agua.

Estos canes se adaptan perfectamente a la vida en apartamentos, aunque en un piso demasiado estrecho pueden sentirse incómodos. Un hogar con un pequeño jardín bien vallado es, por tanto, el ambiente más adecuado para ellos. No obstante, tienen que vivir dentro de casa ya que su lugar es al lado de las personas.

¿Cómo es la salud de los Clumber Spaniel?

En cuanto a salud, los Clumber Spaniel pueden tener problemas en las articulaciones. Lo más habitual son las displasias de cadera y de codo. También hay cierta tendencia al hipotiroidismo en esta raza, lo que se manifiesta a través de la infertilidad, la obesidad y una falta notable de energía.

Otros problemas son el entropión y el ectropión canino, asociados a la vista, así como las infecciones de oído causadas por la humedad que se les acumula en sus grandes y carnosas orejas.