El Kerry blue terrier, también llamado Irish blue terrier, es un perro muy vivaz, adaptable a la vida urbana y de gran personalidad. Además, presenta un particular manto de tonalidad azulada. A continuación explicamos todo lo que hace falta saber sobre esta raza canina.
Orígenes del Kerry blue terrier
Su nombre, Kerry, nos lleva a su condado irlandés de origen. Son descendientes de perros que se dedicaban a la caza y al cobro. En otras palabras, eran ejemplares que podían perseguir, capturar, matar y transportar a sus presas.
Este perro irlandés fue reconocido a nivel internacional en el año 1922. Fue Casey Hewitt la criadora británica que estableció el estándar. Por otra parte, el gobierno, por decreto, lo proclamó perro nacional de Irlanda.
Características de los terrier
Buena parte de la personalidad que muestra el Kerry blue terrier procede de su herencia como perro terrier que es. Su denominación deriva del latín terra, que tiene el significado de «tierra». Se considera que este tipo de perros surgen hace relativamente poco tiempo. No es hasta el siglo XVI cuando se encuentran textos en los que se mencionan perros de este tipo.
En concreto, un doctor británico llamado John Caius habló de los terrier como de perros pendencieros, que destacaban por su agilidad y capacidad atlética, además de poseer una gran vivacidad. Según él, no eran para nada perros falderos y, al contrario, debían vivir solo en los establos.
Además, se les considera perros de gran fortaleza, alegría y entusiasmo por la vida. Viven tan intensamente que incluso cuando enferman con patologías de gravedad que afectarían al ánimo de otras razas, los terrier mantienen su vivacidad y el gusto por la vida. Aun en situaciones difíciles, son duros. Esta capacidad mejora su esperanza de vida.
El color del Kerry blue terrier
Probablemente sea su especial tonalidad uno de los rasgos más destacados de esta raza. Para mayor curiosidad, los cachorros de Kerry blue terrier nacen negros por completo, pero su pelaje va modificándose, pasando a una tonalidad azulada al crecer.
Este cambio se produce entre los 9 y los 24 meses de edad. En líneas generales, cuanto antes se produzca el paso del color negro al azul, más clara será la coloración final que le quede al perro cuando llegue a la edad adulta.
El manto del Kerry blue terrier
Además de su color azulado su manto presenta más particularidades. Así, el Kerry blue terrier carece de capa interna y dispone de una capa externa que no se desprende. Puede parecer una ventaja, pero hay que tener en cuenta que su arreglo debe hacerse con tijeras.
Por ello se recomienda dejarlo en manos de un peluquero canino profesional al que habrá que acudir con regularidad. Su barba abundante requiere una atención constante para mantenerla en óptimo estado, limpia y sin enredos. Es una buena muestra de la velocidad a la que le crece el pelo, que le cubre hasta los pies.
Un perro muy peculiar
No solo las características de su pelaje nos llamarán la atención. Su personalidad y la gran versatilidad que muestra es otra cualidad muy apreciada, ya que lo hacen apto para hogares muy diferentes y muy distintas funciones.
Así, resulta un excelente perro de compañía para cualquier familia que pueda cubrir sus necesidades. También puede ser un muy buen perro guardián, que no dudará en avisar ante la presencia de cualquier intruso o ruido extraño. Esta capacidad la desarrollará tanto si vive en una casa en la que disponga de espacio exterior como si está alojado en un apartamento.
Además, es un perro de orígenes cazadores. En su Irlanda natal sigue persiguiendo ratas y conejos. Por último, también ha mostrado sus altas capacidades para el pastoreo con un gran éxito. En cualquier caso y por encima de todo son animales de una muy alta vivacidad, lo que hay que considerar a la hora de plantearse su adopción.
Comportamiento de juego del Kerry blue terrier
La fuerza, personalidad, vivacidad y alegría que muestran los ejemplares de Kerry blue terrier se canalizan en el momento del juego. Les encanta jugar y lo hacen a lo bruto y en completo desorden, dando muestra de una energía ilimitada. Este carácter juguetón es positivo, pero hay que tener cuidado en las interacciones con los niños, pues podrían tirarlos en la acción.
Por otra parte, esta energía necesita ser encauzada. En otras palabras, tienen que poder hacer todo el ejercicio que necesitan, independientemente de que vivan en un apartamento o en una casa. De lo contrario podrían surgir problemas de comportamiento relacionados con la frustración y la energía acumulada.
Un perro inteligente
Por último, el Kerry blue terrier es un perro considerado bastante inteligente. En la lista que elaboró el psicólogo Stanley Coren a respecto de la inteligencia canina está situado en el puesto 35 de un total de 79. Es un listado basado en la valoración de la capacidad para el aprendizaje y la obediencia de distintas razas.
La interpretación de estos resultados señala que el Kerry blue terrier es un perro capaz de aprender órdenes necesitando relativamente pocas repeticiones. Además, en un elevado porcentaje de ocasiones va a responder y ejecutar correctamente la orden que se le indica.
La capacidad para el aprendizaje es una buena virtud para poder educar a un perro, pero la inteligencia también implica la necesidad de una considerable estimulación a nivel mental. De lo contrario surgirán problemas de comportamiento.