La raza Shar pei ha aumentado su popularidad en los últimos años. Desde luego, condiciones no le faltan. Pero también son perros con necesidades específicas que debemos poder cubrir si queremos ser su compañero ideal.
Antes de adoptar un Shar pei
La popularidad creciente del Shar pei lleva a que cada vez más personas conozcan a estos perros. Algunas pueden sentirse atraídas por su aspecto físico o por sus cualidades psicológicas.
En cualquier caso, adoptar un Shar pei sin contar con toda la información sobre su personalidad, sus características o los cuidados veterinarios que necesita suele ser un error. Puede llevar a no conseguir educar al perro o no poder hacer frente a sus gastos veterinarios.
Estas situaciones, desgraciadamente, suelen tener un mal final para el Shar pei. Para evitarlo, vamos a repasar todo lo que tienes que tener en cuenta para saber si el Shar pei es o no tu perro ideal.
Características del perro Shar pei
En primer lugar, es interesante saber que el Shar pei es un perro de origen chino con una antigüedad que se remonta al siglo XVI. Se trata de una raza empleada para las peleas de perros, además de para el pastoreo o la caza. Aunque hoy en día lo encontremos como perro de compañía, sus orígenes han dejado huella en su físico y en su carácter.
Son perros de talla mediana. Pesan, de media, unos 20 kg, aunque hay diferencias según se trate de un macho o de una hembra. Este dato es relevante a la hora de decidirse a adoptar uno. Por una parte, va a influir en los gastos, ya que alimentación, desparasitaciones, camas, etc. cuestan más cuanto más grandes son los perros.
También hay que tener en cuenta el tamaño para tener una idea de la fuerza que necesitaremos para su manejo o del espacio que va a necesitar en casa o en un vehículo, si lo podemos llevar o no a todas partes, etc. Además, algunos cuidadores se fijan también en la esperanza de vida media del perro. En el caso del Shar pei, esta se sitúa entre 11-12 años.
Carácter y comportamiento del Shar pei
Los Shar pei son perros fuertes tanto a nivel físico como en cuanto a su carácter. Es fácil que se muestren testarudos. Si siempre es necesario dedicar tiempo a proporcionarle al perro socialización y educación, mucho más en el caso de razas de este tipo.
Además, son inteligentes y activos, lo que quiere decir que van a necesitar estimulación tanto a nivel mental como físico. Hay que proporcionarles ejercicio y atenderlos para evitar la frustración y el aburrimiento. También tienen un punto de independencia. Por todo ello no se recomiendan para cuidadores primerizos sin experiencia.
Curiosidades del Shar pei
Es innegable que el aspecto físico del Shar pei resulta muy curioso. Cuenta con unos ojos pequeños y un peculiar hocico acolchado y de mandíbulas fuertes. Otra parte de su anatomía que llama la atención son las orejas, plegadas sobre sí mismas, gruesas y pegadas a la cabeza.
Por otra parte, su manto, que le permite soportar bajas temperaturas, requiere cuidados regulares y desprende un olor fuerte. Forma pliegues o arrugas en distintas partes de su cuerpo, como el cráneo, la cruz o la zona de inserción de la cola. No es fácil de bañar ni de secar, por eso son tareas que muchos cuidadores dejan a profesionales.
Pero, además, estas características que hemos destacado son fuente de problemas de salud. Esto implica que el cuidador de un Shar pei va a tener que prestar una atención adecuada y regular a todas ellas. Pero, también, que hay un mayor riesgo de que se produzcan trastornos que requieran asistencia veterinaria, con el gasto que esto conlleva.
Enfermedades comunes del Shar pei
Así, es fácil que estos perros presenten problemas oculares al punto de necesitar operaciones quirúrgicas para resolverlos. El más común es el entropión. Los pliegues de la piel y la conformación de las orejas, propician la aparición de distintas infecciones, a las que son especialmente propensos.
De igual modo, presentan tendencia a sufrir intolerancias y alergias alimenticias. En conclusión, el Shar pei será un perro adecuado para ti siempre que puedas hacerte cargo de prevenir y tratar todos estos problemas de salud, que van a suponer gastos de veterinario. Por cierto, ten en cuenta que sus belfos, paladar, encías y lengua son de color negro azulado.
Principales problemas de conducta del Shar pei
Sin socialización o educación adecuadas, algunos ejemplares pueden llegar a mostrarse agresivos y muy nerviosos. Sin atención ni el ejercicio que necesitan es fácil que surjan problemas de conducta.
También es posible que se den conflictos con otros perros, por lo que, si ya hay otro en casa, hay que realizar las presentaciones cuidadosamente. Por lo tanto, el Shar pei será tu perro ideal siempre que puedas dedicarle tiempo a educarlo y socializarlo y tengas claro que no son perros falderos.