El Braco de Weimar, más conocido por su nombre alemán Weimaraner, es un perro que podemos encontrar distribuido por todo el mundo. Esta raza llama la atención por su original color, pero, además, es un perro tranquilo y obediente.
Datos básicos
- Altura: 56-69 cm.
- Peso: 32-39 kg, las hembras son algo más pequeñas tanto en altura como en peso.
- Esperanza de vida: 12-13 años.
- Ideales para: familias activas.
Orígenes de la raza
El Braco de Weimar es una raza de origen alemán. Se data su creación en el siglo XVII. Aunque su estándar actual proviene de la cría que fue desarrollada durante el siglo XIX. Es un perro que se relacionó con la caza, al principio mayor, el cobro y el rastreo, incluso en el agua, ya que su pelaje denso le confiere una buena protección.
Pero, aunque todavía podemos encontrar ejemplares dedicados a este fin, la gran mayoría, a día de hoy, son perros de compañía. Su nombre se relaciona con el duque de Weimar, aunque poco más se conoce sobre los orígenes de esta raza. En ocasiones se ha emparentado con un perro ya extinguido conocido con el nombre de Leithund.
Lo que parece contrastado es que se trataba de un perro exclusivo. Aunque se destinaba a la caza, no convivía en rehalas, sino con sus propietarios, que pertenecían a la nobleza. En la actualidad se encuentra más extendido en los Estados Unidos, donde desarrolla diferentes tareas al margen de la compañía. Allí se le llama fantasma gris.
Características físicas del Braco de Weimar
El Weimaraner es un perro de tamaño mediano-grande. Destaca un cráneo y un hocico alargados y un stop corto. La trufa es marrón. Las orejas son de inserción alta, anchas, largas y de puntas redondeadas. El rasgo facial que más llama la atención son los ojos, de un color que oscila entre el gris y el azul. Al crecer cambian a verdoso y ámbar.
Era costumbre cortar la cola de los ejemplares cazadores. Esta intervención, innecesaria y perjudicial, está prohibida cada vez en más lugares. Además de los ojos, la característica que más destaca es la tonalidad del manto, de color único. Puede definirse como un tono acero o plata brillante. Junto a su conformación física, le confiere un aspecto elegante y distinguido.
El pecho es profundo, con las costillas arqueadas y los hombros potentes. Las patas son fuertes y musculosas, siendo las delanteras rectas y las traseras angulosas. Aunque el Weimaraner más abundante es de pelo corto y liso, existe una variedad de pelaje largo, menos común. Las características físicas son prácticamente iguales en ambos.
Temperamento del Braco de Weimar
Esta raza, independientemente de que se trate de la variedad de pelo corto o la de pelo largo, es de carácter tranquilo, dulce, buena en la convivencia con los niños, de confianza, cariñoso y adaptable a la vida en los ambientes urbanos. Aunque también puede disfrutar de la vida en zonas rurales.
Además de su temperamento apacible, es un perro equilibrado, constante e inteligente, al que resulta sencillo enseñar las órdenes básicas. Por otra parte, son perros que se mantienen alerta, son curiosos y destacan por su valentía, dinamismo y capacidad de trabajo. Además, son fuertes, veloces y resistentes.
Todas estas aptitudes los hacen buenos perros guardianes. Eso sí, algunos ejemplares tienen tendencia a la timidez y la desconfianza, llegando incluso a resultar temerosos y reservados. Por eso es importante una buena socialización. Otros pueden ser tercos e independientes. No son agresivos. Disfrutan de la compañía de las personas y no aceptan bien quedarse solos.
Cuidados básicos
Es un perro que prefiere los climas cálidos y, por ello, resiste mal las temperaturas más frías. No conviene, por lo tanto, mantenerlo en el exterior. Su manto permite una higiene sencilla, ya que no necesita cuidados muy frecuentes. Basta con cepillarlo con cepillo o manopla para perros de pelo corto de vez en cuando.
Usaremos un cepillo adecuado y más frecuencia si convivimos con la variedad de pelo largo. Aunque en estos perros la mayor longitud capilar se localiza en las orejas, con lo que es sencillo mantenerlos cuidados y sin nudos. Hay que limpiar con regularidad los oídos. Las orejas caídas ventilan menos y eso es causa de infecciones.
Es un perro que necesita realizar una actividad física considerable. Tanto si reside en un apartamento como en una casa con espacio exterior, tenemos que proporcionarle paseos largos a diario y la posibilidad frecuente de correr y jugar. No podemos olvidarnos tampoco de estimularlo a nivel intelectual. Como sugerencia pueden practicar agility.
¿Cómo alimentar correctamente a un Braco de Weimar?
El braco de Weimar es una raza que necesita una alimentación elevada en
proteína, nutritiva, de alto valor biológico, con energía metablizable
superior a 4000 Kcal, y con contenido en condroprotectores.
De cachorro, recomendamos puppy gourmet desde los 50 días hasta los 7
meses. Un producto variado, nutritivo, con fuentes diversas y de primera
calidad. Elevado en condroprotectores, y con energía metabolizable
elevada adecuada para esta fase.
Desde los 7 meses hasta los 14, recomendamos maxi junior. Para un
desarrollo paulatino y progresivo, evitando tirones bruscos que puedan
afectar a las articulaciones.
A partir de los 14 meses, recomendamos los siguientes productos:
Large breed, maxi adult o working dog. Todos ellos nutritivos,
superiores a 4000 kcal, variados y elevados en proteína y con
condroprotectores. Todos ellos con excelente asimilación de los
nutrientes, disminuyendo riesgos en torsión de estómago.
Principales problemas de salud
Se considera una raza propensa a sufrir un trastorno denominado torsión-dilatación de estómago. Es un problema grave, incluso mortal, que podemos evitar impidiéndole atracones o que consuma grandes cantidades de agua antes o después de realizar ejercicio.
En el aspecto psicológico, los ejemplares que se ven obligados a pasar solos muchas horas pueden desarrollar un cuadro de ansiedad por separación. Este se caracteriza por lloros, destrozos o eliminación inadecuada en cuanto el perro se ve solo en casa.
Hay que modificar su rutina y podemos seguir los consejos de un educador canino, un veterinario especializado en comportamiento o un etólogo. Para empezar, se recomienda ofrecerle compañía y actividad.
