Aunque todas las razas caninas tienen un instinto de protección territorial, este rasgo está más presente en unas que en otras. Hay perros que, debido a su naturaleza, son más aptos para cuidar a las personas o a los hogares. A continuación te presentamos nuestro top 6 de razas de perros guardianes.
Dóberman
Estos imponentes canes de pelaje oscuro y brillante comenzaron a criarse a partir del siglo XIX en Alemania. Son perros fuertes y veloces, ideales para tareas de vigilancia. Su gran inteligencia facilita el adiestramiento.
Además, muestran una gran confianza en sí mismos y una tremenda valentía. Son ideales como perros de guardia, para tareas en las fuerzas de seguridad o como rastreadores, ya que cuentan con un gran olfato y un sentido de la vista muy desarrollado.
Los perros Dóberman son muy protectores, especialmente con su familia, con quienes suelen mostrarse leales y amistosos. Sin embargo, necesitan una mano firme y experimentada para evitar cualquier tipo de problema de conducta en la edad adulta.
Rottweiler
Los Rottweiler son excelentes perros guardianes, tanto por su inteligencia como por su aspecto. Llevan el instinto de protección en la sangre. En la Edad Media, se cuenta, los carniceros colgaban del cuello de estos canes bolsas con dinero. ¡Y nadie osaba quitárselas!
Lo cierto es que son canes muy amigables con su círculo íntimo, pero bastante desconfiados con los extraños. Si detectan cualquier amenaza no dudarán en reaccionar. Por ello, una buena educación y socialización desde cachorros ayudará a evitar comportamientos agresivos.
Su versatilidad es otra característica que les define, pues podemos verles como perros policías, de rastreo, de rescate e incluso como guías. Necesitan ejercicio moderado y pueden adaptarse muy bien a distintos tipos de hogar, aunque una casa con jardín es el ambiente en el que se sentirán más a gusto.
Bullmastif
Con su particular hocico achatado y su cara arrugada, es una de las razas mejor preparadas para hacer de perros guardianes. No son muy activos físicamente, ladran poco y dan la impresión de ser tranquilos, pero no conviene confiarse porque están siempre en alerta.
Con sus casi 70 centímetros de altura y sus 60 kilos de peso, el aspecto de estos perros puede disuadir a cualquiera. Poseen una monumental fuerza y no dudan a la hora de proteger a los suyos. La lealtad es muy importante para estos grandullones. Con la familia son extremadamente cariñosos y obedientes. Además, pueden adaptarse bien a la vida en la ciudad.
Pastor Alemán
Utilizados originalmente para cuidar del ganado, los ejemplares de esta raza se desempeñan muy bien como perros guardianes. Son extremadamente inteligentes y versátiles, por lo que pueden realizar tareas de protección, pero también de salvamento, rastreo o como perros guía.
A nivel general, la raza de Pastor Ovejero es muy sociable y tranquilo dentro del hogar. Por eso, los pastores alemanes son ideales para familias con niños.
Crestado Rodesiano
De origen africano, tiene excelentes dotes como perro guardián. Desciende de los perros que ayudaban a las tribus a cazar leones, lo que les da una valentía y un arrojo sin igual.
Los individuos de esta raza poseen cuerpos musculosos y muy fuertes. Son fieles con su familia, pero bastante desconfiados con los extraños. Tienen un temperamento fuerte y, a veces, pueden ser algo tozudos. Necesitan, por tanto, una instrucción firme y un dueño con carácter que sepa manejarlos.
Komondor
Pese al aire bonachón que les da su pelaje, con gruesos mechones similares a las rastas, estos perros de origen húngaro tienen instintos de protección muy desarrollados. Suelen ser desconfiados con la gente que no conocen, lo que hace que sean buenos perros de guardia.
Utilizados antiguamente como pastores, no solo pueden ponerse al cuidado de ovejas y vacas: también de personas y casas. Cuentan con un temperamento tranquilo, pero a la vez son muy valientes. No son nada agresivos y, si están bien socializados, son cariñosos y pacientes con los niños.