Es una de las razas preferidas para el ámbito doméstico, debido a su personalidad amable. En casa, un Teddy Roosevelt Terrier te seguirá sin parar, tratando de pasar un rato más contigo. Y, a la mínima que le muestres la correa, se pondrá contento, pues pasear es su segunda actividad preferida. ¿Ya sabes cuál es la primera? ¡Atrapar ratones! Sigue leyendo para conocer más detalles sobre uno de los perros más simpáticos del universo canino.

Datos básicos

  • Tamaño: entre 20 y 35 cm de altura
  • Peso: entre 3,6 y 11 kilos
  • Esperanza de vida: entre 14 y 16 años
  • Ideales para: familias; convivir en pisos o en casas con jardín; labores de guarda.

Historia del Teddy Roosevelt Terrier

La historia de estos Terrier con acento norteamericano está íntimamente ligada a la de los Terriers ratoneros. Se especula que ambos llegaron a América del Norte en el siglo XVIII, acompañando a los inmigrantes británicos que buscaban un futuro mejor en el Nuevo Mundo. Su función era evitar las plagas de roedores en almacenes y hogares. Entre los antepasados de esta variedad está el antiguo Bull Terrier, el Terrier de Manchester, el Beagle y el extinto Terrier negro y fuego.

Aunque las diferencias entre el Teddy Roosevelt y el Rat Terrier son evidentes, durante mucho tiempo se consideraron parte de la misma raza. De hecho, hasta 1999 los Teddy fueron conocidos como los “rateros de patas cortas”. Tras un proceso de estandarización, fueron bautizados así en honor al presidente Theodore Roosevelt, gran entusiasta de este tipo de canes.

Características del Teddy Roosevelt Terrier

Los Teddy Roosevelt Terrier tienen una forma rectangular y patas muy cortas, por lo que se mueven siempre a ras de suelo. Son ejemplares de contextura robusta, pero a la vez muestran agilidad y armonía en sus movimientos. Su cuello es moderadamente largo y algo arqueado; continúa en un lomo nivelado y en una grupa corta.

Por otro lado, cuentan con un pecho vigoroso y un vientre apenas recogido. Las patas son cortas, fuertes y bien desarrolladas. La cola es gruesa en la base y se afina hacia la punta.

La cabeza de los Teddy Roosevelt Terrier es proporcional al resto del cuerpo. El cráneo es ancho y se estiliza hacia el hocico. Los ojos son ovalados, bastante pequeños y situados oblicuamente sobre el rostro; su color combina con el del manto.

Las orejas tienen forma de V. Pueden presentarse erguidas, medio erguidas o con las puntas caídas, pero nunca colgando.

El pelaje es corto y denso, con una textura más o menos suave según el ejemplar. Pueden presentar cualquier combinación de color, aunque el blanco siempre debe estar presente. Lo más habitual es que veamos ejemplares blancos y negros o blancos y chocolate.

¿Cómo es el carácter de un Teddy Roosevelt Terrier?

Esta raza de perros vivaces es amigable y muy cariñosa con su grupo familiar. Los Teddy Roosevelt Terrier suelen mostrar su preferencia hacia aquellas personas que les entrenan o que pasan más tiempo a su lado. Les encanta la compañía humana y disfrutan siendo uno más de la familia.

Son canes recomendables para hogares con niños, ya que se llevan muy bien con los más peques. Además, su instinto de manada se mantiene latente, por lo que no tendrán problemas en compartir el hogar con otros perros, e incluso con gatos.

Sin embargo, en un primer momento, tienden a mostrarse algo desconfiados con los extraños. Suelen acercarse a la puerta cada vez que alguien llega al hogar para controlar que todo esté en orden. Son canes bastante territoriales, un rasgo que les hace ser buenos perros guardianes.

Su disposición es positiva, alerta y enérgica. Esto, sumado a la necesidad que tienen de agradar, hace que sean perros fáciles de entrenar. Pero… ¡ojo! También son inteligentes y curiosos, por lo que pueden aburrirse con facilidad con ejercicios muy repetitivos. Por eso, es importante que durante su aprendizaje no olvides que necesitan retos constantes.

La socialización temprana y los refuerzos positivos son de gran ayuda en sus primeros años. También necesitarás tener algo de paciencia, ya que esta raza madura lentamente. Un Teddy Roosevelt Terrier puede seguir siendo un cachorro juguetón hasta los tres 3 años de edad.

¿Qué cuidados precisa esta raza?

Debido a su tamaño, los perros de esta raza se adaptan a todo tipo de viviendas. Si habitan en hogares pequeños necesitarán salir a menudo para liberar energía. Una sesión de juegos o practicar algún deporte canino son buenas elecciones para el día a día. Lo ideal es que dispongan de una casa con jardín. Eso sí, procura que esté bien vallado. ¿El motivo? Son grandes cavadores y podrían escaparse si no tienes este aspecto en cuenta.

Para que un Teddy Roosevelt Terrier se mantenga equilibrado debe poder pasear cada pocas horas. Es mejor hacerlo con correa, pues su instinto de caza sigue latente y podría salir corriendo tras un animal pequeño. Debido a su finísimo olfato, también podría desviarse del recorrido siguiendo el rastro de algún olor que capte su atención.

Aunque no tienden a mostrarse agresivos con otros canes, sí pueden tratar de imponerse. Para evitar encontronazos no deseados controla sus interacciones, especialmente con razas de contextura poderosa y temperamento dominante; por ejemplo Pitbulls, Rottweilers o Staffordshire Bull Terriers.

Su pelaje es fácil de mantener. Con un cepillado a la semana, utilizando un cepillo suave, será suficiente. No obstante, ten en cuenta que mudan de pelo una vez al año. Es en esos momentos cuando deberás hacerlo más asiduamente.

La salud de los Teddy Roosevelt Terrier: enfermedades más frecuentes

Entre los problemas de salud más habituales de los Teddy Roosevelt Terrier destacan las alergias de todo tipo. También suelen padecer luxaciones patelares en la zona de las rodillas y displasias de cadera o de codo; las articulaciones son uno de sus puntos débiles.

Otra afección relacionada con la raza es la ectopia lentis. Esta posición anormal del cristalino puede tener un origen congénito, pero también puede haber sido causada por un golpe muy fuerte. Aunque en los casos más graves puede comportar la pérdida de la visión, muchas veces puede corregirse por medio de una operación.