El gato Ashera es uno de los felinos más exóticos y enigmáticos dentro del mundo de las razas de gatos, rodeado de un aura de lujo, exclusividad y, a veces, controversia. A diferencia de muchas otras razas felinas con historias centenarias, el Ashera es un producto de la ingeniería genética moderna, diseñado para combinar la majestuosidad de los grandes felinos salvajes con la docilidad y el tamaño manejable de los gatos domésticos.

El origen del Ashera se remonta a principios del siglo XXI, cuando la empresa Lifestyle Pets, anteriormente conocida como Allerca, anunció el desarrollo de esta impresionante raza. El Ashera es el resultado de complejos cruces genéticos entre dos especies salvajes —el serval africano y el leopardo asiático— y un gato doméstico, probablemente de la raza Bengala. Esta mezcla genética pretendía crear un gato de gran tamaño, con un pelaje distintivo de manchas y rosetas, y una naturaleza amigable y adaptable a la vida en el hogar.

Sin embargo, la existencia del Ashera ha estado marcada por la controversia, especialmente en lo que respecta a su autenticidad como raza distinta. Hasta la fecha, el gato Ashera no ha sido reconocido oficialmente por las principales asociaciones felinas internacionales. 

Morfología de la raza Ashera

La morfología del gato Ashera es, sin duda, uno de sus atributos más impresionantes y distintivos, reflejando una fascinante combinación de elegancia salvaje y belleza exótica. Esta raza, diseñada a través de complejos procesos de ingeniería genética, ostenta características físicas que la diferencian no solo de los gatos domésticos comunes sino también de otros híbridos exóticos.

El Ashera es una de las razas de gatos domésticos más grandes, un rasgo heredado de sus ancestros salvajes, el serval africano y el leopardo asiático. Los machos pueden alcanzar un peso de hasta 14 kilogramos, mientras que las hembras suelen ser ligeramente más pequeñas. Su tamaño es uno de los aspectos que más llama la atención, mostrando un cuerpo largo y musculoso que refleja su potencia y agilidad.

Por su parte, el pelaje del Ashera es otra de sus características más notables. Este gato presenta un manto corto, suave al tacto, que exhibe un patrón distintivo de manchas y rosetas, reminiscente de sus ancestros salvajes. Los patrones pueden variar significativamente de un individuo a otro, ofreciendo una gama que va desde manchas oscuras sobre un fondo claro hasta rosetas bien definidas que resaltan sobre tonalidades doradas o cremas.

La cabeza es mediana, bien proporcionada respecto a su cuerpo, con un rostro que evoca la nobleza de sus ancestros leopardo. Sus ojos grandes y expresivos son típicamente de un color verde o dorado, con una mirada penetrante que añade a su aura de misterio y exotismo. Las orejas son grandes, anchas en la base y ligeramente redondeadas en los extremos, similares a las de un serval, y a menudo adornadas con manchas negras.

gato Ashera sobre la cocina
gato Ashera sobre la cocina

En cuanto a las patas del Ashera, son largas y fuertes, terminando en pies grandes y redondeados, equipados con garras afiladas que revelan su naturaleza ágil y predadora. Su cola, de longitud media a larga, ayuda a mantener su equilibrio y agilidad, especialmente cuando se mueve a gran velocidad o salta a alturas impresionantes.

Por último, más allá de su morfología, el comportamiento del Ashera es tan singular como su apariencia. A pesar de su herencia salvaje, estos gatos suelen ser tranquilos y afectuosos con sus familias humanas. Son inteligentes y curiosos, lo que requiere de estimulación mental y física regular para mantenerlos activos y contentos. La socialización temprana es clave para asegurar que se desarrollen como compañeros leales y cariñosos.

¿Cuánto cuesta un cachorro de Ashera?

Por si no lo sabias, fue el pasado año 2023 cuando varios medios de comunicación catalogaron al gato Ashera como “el gato más exclusivo, nuevo y caro del mundo”, teniendo un precio medio de 17 mil dólares (poco más de 15 mil euros). De hecho, debido a su manipulación genética y exclusividad, se ha llegado a vender por 100.000 dólares (más de 91 mil euros).

Si bien puedes encontrarlo por menos, de momento la raza Ashera seguirá conquistando el podium de la raza más cara del planeta y quizá en un tiempo, si consigue ser aceptada por las principales organizaciones felinas, puede que la veamos algo más económicas para poder adquirir un Ashera y tenerlo con nosotros.