Las pulgas son unos desagradables parásitos externos que se alimentan de la sangre de perros, gatos e incluso seres humanos. Se reproducen con rapidez y la mayoría se encuentran, en distintas fases de crecimiento, en el ambiente, lo que complica su erradicación. ¿Quieres saber cómo eliminar los huevos de las pulgas en perros y gatos? Lo explicamos en el siguiente artículo.
Ciclo de vida de las pulgas
Para poder combatir a estos parásitos con eficacia es importante entender cómo es su ciclo de vida. Así, las pulgas adultas son las que podremos ver sobre el cuerpo de nuestro perro o gato. Son insectos de pocos milímetros de longitud, color negro o parduzco, cuerpo aplanado y patas traseras muy potentes.
Estas características facilitan su supervivencia, pues les permiten deslizarse entre el pelaje y saltar a los animales que parasitan. Pero la mayoría de las pulgas no serán adultas, sino que se encontrarán en el entorno en fases inmaduras (huevo, pupa y larva). Cada pulga hembra es capaz de poner unos 30-60 huevos al día.
Estos no se verán sobre el cuerpo del animal, pues están diseñados para caer al ambiente, preferentemente a grietas y rendijas, como las que puede haber en el suelo. Dependiendo de las condiciones de humedad y temperatura, eclosionarán antes o después. Incluso pueden demorarse meses.
Tras la eclosión, crecerán hasta convertirse en pulgas adultas, volviendo a empezar el ciclo. Por lo tanto, para erradicar los huevos de las pulgas hay que actuar tanto contra los individuos adultos como contra las fases inmaduras.
Desparasitación
Los perros y los gatos deben ser desparasitados con frecuencia. El veterinario es el profesional que tiene que establecer un calendario de desparasitaciones adecuado a las características de cada animal. Aunque no tengan acceso al exterior, nosotros podríamos introducir alguna pulga en casa.
Además, las desparasitaciones deben mantenerse durante todo el año, ya que las condiciones de los hogares, también en los meses de frío, permiten que las pulgas sigan viviendo, aunque se reproduzcan a menor velocidad.
Es importante combatir las pulgas, no solo porque también pueden picar a las personas, sino porque resultan una molestia para los animales y tienen la capacidad de transmitir enfermedades y parásitos internos.
La desparasitación debe hacerse de manera simultánea en todos los animales de la casa. Hay productos desparasitadores que eliminan solo las pulgas adultas, mientras que otros también actúan sobre los huevos, impidiendo su desarrollo. Podemos elegir entre pipetas, collares o pastillas.
Control del ambiente
Como hemos dicho, los huevos y las fases inmaduras de las pulgas estarán en el entorno, sobre todo en los lugares donde los animales pasen más tiempo. Para eliminarlos conviene tener en cuenta las siguientes medidas:
- Lavar: hay que introducir en la lavadora todos los textiles que se puedan lavar, como camas de los animales, fundas de los sofás, mantas, etc. Lo ideal sería utilizar agua a más de 65 ºC.
- Aspirar: mientras haya pulgas en casa, hay que aspirar, mejor a diario, por todos los rincones, también los sofás, levantando los cojines. Al terminar tendremos que tirar la bolsa al contenedor.
- Fregar: a la venta encontraremos distintos insecticidas activos frente a las pulgas. Es muy importante leer bien las instrucciones de uso, pues debemos asegurarnos de que no resulten tóxicos para los animales. Hay que utilizarlos tal y como indique el fabricante para asegurar eficacia y seguridad.
- Limpiar con máquina de vapor: estas máquinas alcanzan temperaturas superiores a los 40 ºC, inactivando los huevos.
- Emplear una bomba insecticida: para grandes infestaciones podemos comprar las llamadas bombas insecticidas, muy efectivas contra los huevos y cualquier otra fase del ciclo vital de las pulgas. El problema es que no pueden estar los animales en casa durante horas, algo difícil de conseguir, sobre todo si se trata de gatos.
Remedios caseros contra los huevos de pulgas
Además de las opciones que hemos mencionado, es posible recurrir a algunos remedios caseros y naturales que pueden acabar con los huevos de las pulgas localizados en el ambiente.
En este punto hay que señalar que sustancias como el vinagre, los cítricos o diferentes aceites esenciales pueden conseguir cierto efecto repelente, pero sobre las pulgas adultas. Para actuar sobre los huevos debemos alterar las condiciones de temperatura y humedad que estos necesitan para su correcto desarrollo. Podemos hacerlo con:
- Sal: la sal absorbe la humedad de los huevos, por eso puede actuar sobre ellos.
- Bicarbonato sódico: funciona igual que la sal.
- Tierra de diatomeas: tiene efecto desecante y también puede repeler a las pulgas adultas. Hay varios tipos de esta tierra y no todos son insecticidas, por lo que hay que fijarse en las indicaciones de uso de cada fabricante. Es fácil que los gatos se manchen si echamos tierra de diatomeas por el suelo. No es tóxica para ellos.
Estas sustancias se aplican, se deja que actúen durante la noche y se aspiran al día siguiente. En cualquier caso, debemos saber que para grandes infestaciones este tipo de remedios naturales pueden ser insuficientes. Habrá que recurrir a desparasitadores e insecticidas específicos, como los que se adquieren en clínicas veterinarias y establecimientos especializados.
