Al igual que las personas, los perros también pueden ser víctimas de las picaduras de las avispas. En general, este tipo de lesiones no revisten gravedad, pero hay ocasiones en las que sí podríamos notar una reacción local o incluso más grave.

La temporada de avispas

El riesgo de picaduras de avispas aumenta en los meses más cálidos del año y será todavía mayor si el perro se encuentra cerca de alguna fuente de interés para las avispas. Por ejemplo, comida, bebidas azucaradas o agua.

Perros en peligro de picaduras de avispas

Todos los ejemplares, con independencia de su edad, su sexo o su tamaño, corren el riesgo de ser picados por una avispa. Pero, lógicamente, este aumenta cuanto más tiempo pase el perro en lugares donde es más fácil que se presenten las avispas.

Y en este aspecto, quitando el tiempo de paseo, es más habitual que sean perros de tamaño grande los que pasen más horas o directamente vivan en el exterior. Otro factor a tener en cuenta es la curiosidad del perro. Algunos ejemplares, sobre todo los más jóvenes, pretenden explorar todo lo que encuentran.

Esto incluye insectos que, como en este caso, les pueden llegar a dar un doloroso susto. El principal problema de este afán explorador es que el perro se decida a cazar a la avispa con la boca. La picadura dentro o alrededor de la cavidad bucal será más molesta y complicada. En general, las zonas desprovistas de pelo son las que corren más riesgo.

Síntomas de picadura de avispa en perros

Si estamos en época de calor y acabamos de llegar de un paseo o nuestro perro vive en el exterior, hay algunos signos que nos pueden hacer pensar en que ha sufrido la picadura de una avispa.

Aunque hay que saber que la picadura de otros insectos, como abejas, arañas, mosquitos o incluso garrapatas, también puede desencadenar síntomas similares. En cualquier caso, un perro que ha sido picado mostrará signos como:

  • Inflamación en el lugar de la picadura, que es la señal más frecuente en estos casos.
  • Dolor en la zona.
  • Enrojecimiento.
  • Prurito.
  • Hinchazón de la cara en los casos en los que la picadura haya sido en la cabeza.
  • Problemas respiratorios si la picadura ha ocurrido dentro de la boca, debido a la hinchazón que se origina.

Qué es el shock anafiláctico por picadura de avispa

Por último, algunos perros pueden sufrir una reacción grave a estas picaduras. Se llama shock anafilático y se considera una urgencia. Si el perro no recibe asistencia veterinaria corre el riesgo de fallecer. Este tipo de reacciones se presentan en perros que reciben más de una picadura o ya habían sido picados en el pasado.

En ellos se desencadena una reacción alérgica. Hay que insistir en la importancia de acudir de inmediato al veterinario. El shock anafilático no puede tratarse con remedios caseros. Es necesario estabilizar al perro y colocarle una vía para proporcionarle medicación intravenosa y fluidos.

También puede necesitar oxigenación. Como vemos, se hace imprescindible llevarlo a un centro veterinario. Los perros afectados presentarán síntomas locales como los ya descritos, pero, además, manifestarán signos como los siguientes:

  • Inquietud.
  • Hipersalivación o babeo intenso.
  • Síntoma digestivos como los vómitos o la diarrea.
  • Dificultades respiratorias.
  • Ruidos al respirar si se inflama la laringe.
  • Debilidad generalizada.
  • Convulsiones.
  • En los casos más graves o cuando el perro no recibe atención veterinaria rápida, se produce colapso, coma y, desgraciadamente, la muerte.

Qué hago si a mi perro le pica una avispa

Descontando los casos de shock anafiláctico, en principio no es necesario adoptar ninguna medida ante una picadura de avispa, ya que no suele provocar más que síntomas a nivel local, como una ligera molestia y una inflamación en el punto exacto de la inoculación.

De hecho, es probable que, si no estamos presentes en el momento de la picadura, ni siquiera nos percatemos. Pero si notamos al perro muy molesto tenemos la opción de lavar bien la zona con agua y jabón neutro y, después, aplicar frío. Por ejemplo, podemos, en función del lugar de la picadura, utilizar hielo o alguna bolsa de productos congelados.

Hay que envolverla en un paño de tela o toalla y poner unos minutos sobre la superficie afectada. Nunca le des ningún medicamento a tu perro si no te lo ha recetado el veterinario. Si crees que el frío no le ha aliviado lo suficiente o empeora, acude a tu profesional de referencia.

Es importante acudir al veterinario

Cuando la picadura ha tenido lugar en la cabeza, boca incluida, se aconseja solicitar una revisión veterinaria para anticiparse a posibles complicaciones que, como hemos señalado, pueden aparecer. Es posible que en estos casos el profesional nos recete algún fármaco para controlar la hinchazón antes de que esta cause problemas y llegue a dificultar la respiración.