El Basenji es un antiguo perro de caza de origen africano que ha llegado hasta nuestros días adaptándose perfectamente al papel de perro de compañía. Posee una características peculiares relacionadas con su origen y su antigüedad, como es el aullido.

Datos básicos

  • Altura: 43 cm los machos y 40 las hembras.
  • Peso: 11 kg los machos y 9,5 las hembras.
  • Esperanza de vida: 12 años.
  • Ideales para: familias con cierta actividad.

Origen de la raza Basenji

El Basenji es un perro procedente de África central. De hecho, también se le denomina Perro del Congo. Sus orígenes se remontan a la antigüedad y su función era la caza. La facilidad con la que conseguía camuflarse en el entorno lo convirtió en un cazador muy eficiente.

Apoyado, además, por su resistencia ante el calor y, sobre todo, por el silencio con el que es capaz de rastrear a la presa. En la actualidad, salvo en África, no se dedica a la caza, sino que lo encontramos en los hogares como perro de compañía.

En realidad, se desconoce su origen exacto. Sí se sabe que perros similares al Basenji se representaban ya en tumbas egipcias. Las características actuales de la raza proceden de perros provenientes de Zaire en la década de 1930.

características-del-perro-Basenji

Características físicas del Basenji

Los perros Basenji son de tamaño pequeño-mediano y poseen una constitución esbelta. Sus rasgos son típicos de razas que evolucionaron desde climas cálidos. Destacan sus orejas puntiagudas y erectas. Los ojos, de color avellana oscuro, muestran una expresión penetrante. En la zona de la frente se le forman arrugas como de sorpresa.

El hocico va estrechándose hasta terminar en la punta de la nariz, de color negro. La mandíbula es alargada y el cuello, también alargado y musculoso, está seguido por un pecho no excesivamente ancho. Otra característica destacada es su cola, de inserción alta, que se enrosca formando un anillo sobre el lomo. Las patas son largas y delgadas.

El manto es corto, sedoso, denso, fino y brillante. Facilita la pérdida de calor, fundamental para el clima del que procede. Su coloración le proporciona un camuflaje perfecto en su entorno original. También posee manchas blancas que, junto con la longitud del manto y la forma de las orejas, lo ayudan a soportar el calor.

¿Cómo debe ser un perro Basenji?

El estándar de la Federación Cinológica Internacional sigue las características físicas anteriormente señaladas y marca algunas otras especificaciones como la mordida, que debe ser en tijera. También añade la necesidad de que las costillas se muestren bien arqueadas, profundas y ovaladas. Finalizan en una cintura bien definida.

Los hombros se inclinan hacia atrás. Son musculosos y no cargados. Los codos se pegan al pecho y se alinean con las costillas. Las patas delanteras son rectas, de hueso fino. Las traseras, más fuertes y musculosas. No se acepta que giren hacia dentro o hacia fuera. Los pies son pequeños, compactos, de almohadillas gruesas, dedos arqueados y uñas cortas.

Su paso característico es rápido, largo y ágil. Según el estándar, se aceptan varios colores en el pelaje, como son el negro y el blanco, el rojo y el blanco, el negro, fuego y blanco y el fuego y el blanco. Eso sí, el blanco se limitará a pies, pecho y punta de la cola, aunque son opcionales localizaciones como las patas, una lista en la cara o un collar.

Temperamento de la raza Basenji

Es de buen carácter con los niños y, en general, resulta dócil y afectuoso. Aunque los perros cazadores se asocian a una gran actividad, lo cierto es que se ha adaptado a la vida urbana. Es tranquilo, equilibrado e inteligente. Hay que tener en cuenta que no es fácil de educar, por lo que debemos ser constantes para conseguir nuestros objetivos.

No es guardián ni es buena idea mantenerlo en el exterior, dado que no tolera el frío. Muy silencioso, como el lobo, es verdaderamente raro que ladre. Sí podemos oírlo aullar, igual que el lobo, lo que muestra sus características primitivas. Tiene un aullido peculiar, con un sonido característico que se asemeja al grito tirolés.

Un problema que podemos encontrar es que tiene tendencia a vagabundear, pues posee cierto grado de independencia y de reserva con los extraños. Hay que tener cuidado si lo soltamos y es importante educarlo para conseguir que nos obedezca en cuanto lo llamemos. Si lo castramos, evitamos que pueda huir si detecta una hembra en celo.

Basenji-con-su-cachorro

Cuidados básicos para la raza

El Basenji no soporta bien el frío, por lo que es más adecuado para mantener en ambientes templados. Se adapta a la vida urbana con paseos diarios, que son imprescindibles para su salud tanto física como mental, ya que es un perro que necesita mantenerse activo y despliega una gran curiosidad.

Se recomiendan unos tres paseos diarios, mejor si tiene la posibilidad de correr. Su manto apenas requiere cuidados. Por último, puede convivir con otros perros, pero, si en el hogar viven otros animales, sobre todo de tamaño pequeño, puede aparecer su instinto de caza. Hay que extremar las precauciones. Una correcta socialización es imprescindible.

Principales problemas de salud

Por regla general, son perros que gozan de buena salud. Podemos mencionar alguna propensión a padecer problemas renales, oculares o intestinales. A nivel psicológico, el Basenji que no recibe suficientes estímulos puede desarrollar conductas destructivas.

Por eso, además de los paseos y las oportunidades de juego, es bueno ofrecerle atención y actividades para su inteligencia. Hay juegos de este tipo para perros y también podemos esconder algún objeto y animarlo a que lo busque, aprovechando su instinto para rastrear.

El celo de los Basenji

Como curiosidad, la mayoría de los perros tienen el celo dos veces al año, aproximadamente cada cinco o seis meses. En cambio, el Basenji tiene en común con los cánidos salvajes, por ejemplo el lobo, que posee tan solo un único celo cada año.