El Terrier Tibetano es uno de los perros más solicitados en Canadá y en los países del norte, pero, además de ello, está considerado como “el perro símbolo de la buena suerte”. ¿Sabes por qué? Su curiosa historia y recorrido a lo largo de los siglos ha llamado la atención de numerosos países de todo el mundo, consiguiendo hacerse cada vez más famoso.
Por ello, en este post te queremos contar todo lo que no sabías y que estamos seguros, querrás saber, sobre el Terrier Tibetano.
Procedencia del Terrier Tibetano
Curiosamente, a diferencia de otros perros de la línea Terrier, el Terrier Tibetano no se ha utilizado como perro de presa, sino que éste se encargaba de cuidar el ganado y, solo cuando era necesario, también lo protegía.
Es originario, como su propio nombre indica, del Tíbet, y de hecho está considerado como animal sagrado, ya que el Terrier Tibetano vivió en los monasterios del país y les hacía compañía a los monjes, formando prácticamente parte de la familia.
Y es que, el Terrier Tibetano fue uno de los pocos perros de la antigüedad que estaban considerados como un miembro más del hogar y no como un animal de la granja que ayudaba a las tareas. ¿Maravilloso verdad? Gracias a su vida en los monasterios donde residían los monjes, esto pudo conseguirse cada vez más asiduamente.
Agnes Greig, el antes y el después del Terrier Tibetano
Para que un perro pueda ser conocido mundialmente, es necesario que suceda algo importante como la importación de esa línea a otros países, el reconocimiento del perro en algún club dedicado a sus inscripciones o, como en este caso, algún hecho histórico relevante que llamase la atención a nivel internacional.
Y es que, el Terrier Tibetano comenzó a hacerse popular en Occidente cuando, en 1922, regalaron un cachorro de esta raza a una doctora británica llamada Agnes Greig. El nombre y hazaña de esta mujer ha dado la vuelta al mundo tras salvarle la vida a una señora tibetana, motivo por el cual quisieron agradecerle lo ocurrido con uno de sus famosos “perros sagrados”, en honor a su bondad.
Este hecho fue un antes y un después para el Terrier Tibetano, ya que, tras lo sucedido, el famoso perro que antes solo era conocido en el Tíbet, comenzó a dar la vuelta al mundo cada vez que la doctora salía en la prensa, pudiendo así ser más reconocido y extendiéndose, por ende, el linaje de la raza.
El perro más solicitado en los países del norte
En la actualidad, es muy común encontrarse a estos perros por el parque o por zonas muy frías de montaña, y es que, su gran adaptabilidad a grandes climas fuertes de frío les han otorgado el punto clave por el cual se ha expandido todavía más la raza.
Cada vez hay una mayor parte de la población que prefiere tener un perro que se adapte fácilmente a los climas fríos para no tener que preocuparse de que su perro lo pase mal. Motivo por el cual, el Terrier Tibetano está (según las estadísticas) muy solicitado en Canadá y en países del norte donde el clima es bastante frío.
Esta adaptabilidad se debe al nacimiento de esta raza en una zona de un clima tan extremo como el Tíbet, teniendo una doble capa que recubre también las patas y la cola, convirtiéndole con esto, en perros resistentes y que soportan condiciones extremas.
El Terrier Tibetano, símbolo de la buena suerte
Lo más curioso de la historia del Terrier Tibetano es la leyenda que circula en torno a su pasado. Cuentan que, una vez se hizo famoso en Occidente y tras conocer cuál era su origen (perros protectores de los monjes del Tíbet) los pastores y familias de granjas que los tenían en sus hogares para cuidar del ganado, jamás se planteaban el venderlos o regalarlos, ya que para la sociedad antigua, el Terrier Tibetano era “símbolo de la buena suerte” y nadie se atrevía a “tentar a la suerte”.
Algo increíble y maravilloso ya que así, el Terrier Tibetano tenía asegurada una casa y un mismo hogar para siempre. ¡Perfecto para ellos! Y todo por una leyenda.