Su poblado bigote difícilmente pasa inadvertido. Este chiquitín, cariñoso y valiente pese a su tamaño, es un perro que llama la atención por su expresión casi humana. Descubre lo que nadie te ha contado sobre el Grifón Belga en el siguiente artículo.
El Grifón Belga y sus orígenes como ratonero
Esta raza tiene su origen en un pequeño perro de pelo duro llamado “Smousje”, que vivió hace varios siglos en los alrededores de Bruselas, Bélgica. Era empleado para la caza de ratas en los establos y como vigilante de carruajes. Además, por sus dimensiones, era fácil de mantener.
De este mismo antepasado provienen el Grifón de Bruselas y el Pequeño Brabanzón, primos hermanos del Grifón Belga que comparten un gran parecido con nuestro protagonista de hoy.
Marie – Henriette de Bélgica lo volvió popular
En el siglo XIX el Grifón Belga se cruzó con las razas Cavalier King Charles Spaniel y Carlino, de quienes heredó su pelaje. Fue entonces cuando los cambios se estabilizaron y se avanzó en la estandarización de la variedad.
La mismísima reina Marie-Henriette de Bélgica mostró su interés por ellos e hizo que ganaran popularidad en Europa. Su población descendió bruscamente durante las dos Guerras Mundiales. De hecho, casi se extinguen, pero lograron sobrevivir gracias a los criadores ingleses.
Es un can pequeño con una gran personalidad
A su expresiva carita le acompaña una irresistible y fuerte personalidad. Es un perro ideal para vivir en casa, ya que disfruta de compartir su tiempo con otros animales y humanos.
De todas formas, es importante fomentar una sociabilización adecuada, ya que de ello dependerá su predisposición en la etapa adulta. Es un can que tiende a ladrar si escucha ruidos extraños, por lo que es necesario moderar este comportamiento cuanto antes.
Cualidades no le faltan: es inteligente, equilibrado, activo y cariñoso. Además, resulta fácil de educar. De lo contrario, podría volverse demasiado temperamental. Eso sí, son perros que necesitan mucha compañía para no sufrir ansiedad por separación.
Destaca en las competiciones de Agility
¿Sabías que este peludo es un gran corredor? Un movimiento poderoso y el gran impulso que le ofrecen sus patas traseras le dan una salida digna de ‘Agility’.
Media hora de ejercicio moderado al día es el mínimo para que un Grifón Belga se mantenga en un buen estado de salud. Les encanta jugar y hacer actividades junto a sus personas favoritas. Por ejemplo, ir a buscar la pelota.
Su inteligencia y constitución física permiten que destaque en competiciones de obediencia, agilidad y búsqueda.
¿Por qué la cabeza del Grifón Belga llama tanto la atención?
La cabeza del Grifón Belga es bastante grande en comparación el resto del cuerpo. Nuestro amigo también tiene una expresión casi humana, con ojos grandes, oscuros y redondos. Tanto es así que parece que entiende perfectamente lo que le dices.
Para caracterizar más aún su expresividad, el Grifón Belga posee unas cejas muy pobladas; el complemento perfecto para un rostro adorable que nos hace sonreír sin remedio.
El Grifón Belga y su pelaje
El rasgo distintivo del Grifón Belga, respecto al Grifón de Bruselas y al Pequeño Brabanzón, es su pelaje duro, largo, ondulado y de doble capa. Por lo demás, las tres variedades son muy parecidas.
Respecto al color del manto, el Grifón Belga puede mostrar dos variaciones. En la primera, todo el cuerpo se cubre de un homogéneo y brillante color negro. En la segunda, el pelo oscuro se entremezcla con zonas en tonos fuego que suben por el interior de las patas, el pecho, el mentón, encima de los ojos, en el interior de las orejas y debajo de la cola.
Mantener en buen estado el pelaje del Grifón Belga no es un problema, pues no se enreda con facilidad. No obstante, lo adecuado es cepillarlo entre dos y tres veces por semana para que el manto esté brillante y libre de impurezas.
Asimismo, el mantenimiento de su característica barba y mostacho es importante. Estos tienen un largo mayor y tienden a ensuciarse con mayor frecuencia debido a los mechones que le caen sobre las mejillas.
¿Qué podría penalizar al Grifón Belga en una competición de belleza?
Cuando un ejemplar de Grifón Belga se presenta a una competición de belleza, hay algunos elementos que pueden restarle puntos. Estas faltas están detalladas en el estándar de la raza.
En este caso, mostrar otros colores como el gris, el azul o el marrón, así como cualquier mancha blanca, un carácter muy tímido o la lengua visible pese a tener la boca cerrada, serían aspectos no deseables.
Sin embargo, como compañero de vida, seguramente terminarás queriéndolo tanto o más por estas pequeñas “imperfecciones”. ¿A que sí?