Estas tumoraciones benignas superficiales son muy frecuentes, especialmente en canes jóvenes y en los de mayor edad. ¿Te preguntas si las verrugas en perros se contagian? ¿Quieres saber si se pueden eliminar? En este artículo tenemos la respuesta.
Por lo general puedes estar tranquilo, ya que no representan un problema grave. Sin embargo, cuando sangran o se multiplican con demasiada rapidez, conviene que sean revisadas por un profesional.
¿Qué causa la aparición de estas verrugas en un perro?
El virus del papiloma canino es el que provoca la aparición de verrugas en perros, que son agrupaciones anormales de células en la piel. Todos los canes están expuestos a este virus. No obstante, éste solo se hace presente de forma visible cuando la respuesta del organismo no es efectiva al 100%.
Normalmente los perros con un sistema inmunológico demasiado débil, son los que suelen desarrollar papilomatosis. Esto explica que los canes con un mayor riesgo de padecer un brote sean:
- Los de mayor edad
- Perros jóvenes o cachorros
- Aquellos canes enfermos o más débiles
Diversos estudios demuestran que no hay una mayor prevalencia entre machos y hembras o según el tipo de raza. La clave de este trastorno está, por lo tanto, en las defensas.
Generalmente las verrugas no causan dolor, aunque sí pueden provocar molestias y sangrado. Debido a su crecimiento en racimo se caracterizan por tener un aspecto en forma de coliflor. Pese a ello, pueden confundirse con otros abultamientos no virales que provocan tumores benignos parecidos, como los adenomas sebáceos o epiteliomas caninos.
Cómo afecta la papilomatosis a perros jóvenes y mayores
La papilomatosis en perros jóvenes o cachorros afecta principalmente a la zona de la boca y, en menor frecuencia, a la de los ojos. El contagio suele producirse por contacto directo con otros canes infectados, al lamerse o saludarse con el hocico. No obstante, también puede darse por la picadura de algunos insectos o debido a cortes y raspaduras que provocan lesiones e inflamación.
Un perro menor de dos años aún tiene un sistema inmunológico inmaduro, por lo que es más propenso a desarrollar este tipo de tumoraciones al no poder reaccionar con la efectividad de un adulto sano para eliminar el virus. Por lo general, en estos casos, el problema tiende a desaparecer al cabo de unos meses.
Los canes enfermos y/o mayores también suelen desarrollar verrugas en distintas partes de su cuerpo. Algunas veces esta reacción tiene que ver con un tratamiento con fármacos inmunodepresores, utilizados para el abordaje de otras patologías cutáneas.
¿Son contagiosas las verrugas caninas?
Una duda muy habitual en las consultas veterinarias es si las verrugas en perros son realmente contagiosas, ya sea para otros canes o para los humanos. Lo cierto es que estas protuberancias en la piel sí pueden propagarse entre congéneres, pero nunca entre animales de otras especies.
Por lo tanto, si un can afectado convive con otros perros que aún no tienen verrugas visibles, consulta con tu veterinario y evita el contacto entre ellos hasta que no hayan sido tratadas con éxito. No debes preocuparte, en cambio, si tus hijos juegan con un can con verrugas o si tienes un gato en casa.
Tratamiento más habitual para eliminar las verrugas en perros
Una vez el experto inspeccione al perro y confirme que tiene verrugas, el siguiente paso es determinar si éstas suponen un problema para su calidad de vida. Al ser tumoraciones benignas, pueden no requerir ningún tratamiento especial más allá de una alimentación adecuada y una vida sin estrés para tenerlas bajo control.
En cambio, cuando sangran, cambian de color o de forma, tal vez lo más conveniente sea eliminarlas. Es necesario actuar si son perros menores de dos años con una inmunodeficiencia congénita que les provoca una infección viral masiva. Esta circunstancia puede causarles dolor, dificultando que coman o beban con normalidad.
Para acabar con las verrugas el veterinario recomendará probablemente un tratamiento con medicamentos. En otros casos, cuando son más localizadas, pueden extirparse con una intervención quirúrgica simple. Nada de ello elimina el virus por completo, por lo que debes tener en cuenta que las tumoraciones pueden reaparecer en cualquier momento.
Lo que no debes hacer nunca, bajo ninguna circunstancia, es intentar quemarlas tú solo en casa o poner en práctica otros remedios para tratar las verrugas en humanos. La vacunación excesiva tampoco ayuda, pues no es extraño que los perros con verrugas sean los que han recibido demasiadas dosis autoinmunes o los que han reaccionado a ellas de manera negativa.
Fuentes consultadas:
Calvert C.A. Papilomatosis viral canina. En: Greene CE (ed). Enfermedades infecciosas en perros y gatos. Segunda edición. México. McGraw-Hill Interamericana. 2000: 54-56