A día de hoy, es indiscutible el beneficio de la vacunación para proteger a perros de todas las edades de enfermedades potencialmente fatales. Esta protección es especialmente importante en los cachorros, que todavía no tienen maduro su sistema inmune y, por lo tanto, resultan más vulnerables ante cualquier patógeno.

Pero es importante vacunar siguiendo los protocolos adecuados, pues es la única manera de conseguir la máxima efectividad en la protección. En el siguiente artículo, hablamos de las vacunas para cachorros.

Cómo funcionan las vacunas

Las vacunas funcionan presentando al sistema inmune virus o bacterias causantes de enfermedades. Se suelen emplear en su elaboración fragmentos o patógenos inactivados, que no llegan a desencadenar la enfermedad, pero sí sirven para “entrenar” al sistema inmune.

De esta manera, este sistema, de una forma controlada, puede preparar defensas contra ellas. Así, si en un futuro el perro entra en contacto con los patógenos causantes, tendrá ya las defensas listas para hacerles frente.

Hay que recordar que suele vacunarse contra enfermedades muy graves, que pueden acabar con la vida del animal con rapidez. La correcta vacunación reduce mucho este riesgo.

Vacunación y revacunación

Durante la primovacunación, es decir, en la administración de las primeras dosis de las vacunas, se consigue un elevado grado de inmunidad, pero no la totalidad del que puede ofrecer la vacuna. Por este motivo, los cachorros tienen que recibir una segunda dosis, normalmente unas 3-4 semanas después de la primera.

En la edad adulta suele llegar una revacunación cada año (o más, dependiendo de la enfermedad) para mantener la inmunidad. Hay que saber que las vacunas no solo protegen al perro al que se le administran, sino que ayudan a evitar que estas enfermedades se propaguen.

Cuándo se pone la primera vacuna

Habitualmente, la primera vacuna se administra a los cachorros hacia las 6-9 semanas de vida, pero es el veterinario quien, en función de las características y el modo de vida de cada perro, decida la fecha exacta.

El problema está en que las vacunas pueden interaccionar con los anticuerpos que proporciona la perra a sus cachorros, perdiendo efectividad. Estos anticuerpos, que también protegen a los perritos, van disminuyendo desde el nacimiento hasta su total desaparición.

Por este motivo, es difícil establecer el momento ideal exacto para poner la primera vacuna. Va a influir la edad, la cantidad de anticuerpos transmitidos por la madre, su estado vacunal, etc. Además, se sabe que algunas razas son especialmente sensibles a ciertos virus, como los dóberman y los rottweiler al parvovirus.

Estos cachorros suelen vacunarse antes, incluso ya a las 4 semanas. En cualquier caso, como hemos explicado, el momento de administración de la primera vacuna es una decisión que solo puede tomar el veterinario.

¿Qué vacunas se les ponen a los cachorros?

Como siempre, el veterinario examinará cada caso para establecer el mejor calendario de vacunación, ajustado a las circunstancias de cada animal. Las que suelen incluirse siempre por considerarse esenciales son las que los protegen del moquillo, la parvovirosis y la hepatitis vírica.

Otras vacunas son altamente recomendables, como la que se administra contra la leptospirosis. Existen más vacunas, como la que protege de la tos de las perreras o de la leishmaniosis, que se pondrán o no según las necesidades de cada ejemplar. Una única vacuna es obligatoria por ley en casi todo el territorio español. Es la de la rabia.

Calendario de vacunación

Con las diferencias que hemos mencionado para cada ejemplar, podemos dar una pauta general de administración de vacunas en los cachorros. Es la siguiente:

  • Primera vacuna (6-9 semanas de vida o incluso 4): puede administrarse una primera dosis que solo proteja contra el parvovirus o aplicar una vacuna bivalente, es decir, que ofrece protección frente a dos enfermedades, en este caso, parvovirosis y moquillo. En ocasiones, se pone una única dosis polivalente (contra varias enfermedades en un solo pinchazo).
  • Segunda vacuna (entre 3-4 semanas después de la primera): en este momento, se recomienda la administración de una vacuna polivalente, que va a incluir, además de las enfermedades mencionadas, protección adicional frente a enfermedades como la leptospirosis.
  • Tercera vacuna (3-4 semanas después de la segunda dosis): es la repetición de la vacuna polivalente escogida (se comercializan varias) para garantizar una protección final más completa.

¿Las vacunas son seguras?

Las vacunas para perros de las que disponemos en la actualidad son seguras y efectivas, siempre que se administren de forma correcta. Por supuesto, es competencia exclusiva del veterinario. Ningún otro profesional, ni siquiera un ATV, puede poner una vacuna.

Eso sí, hay que saber que, al igual que en las personas, pueden provocar reacciones leves, como fiebre o letargo, que suelen resolverse de forma espontánea en 24-48 horas. También puede haber reacción en el punto de inoculación.

Solo de forma excepcional, algunos perros presentarán reacciones alérgicas graves, que requieren la atención inmediata del veterinario. Son infrecuentes, pero justifican la importancia de que solo este profesional vacune.