El gato Manx

El Manx es inconfundible, pues se trata de un gato sin cola o, al menos, con la cola mucho más corta de lo normal. Además, son gatos de complexión fuerte, tamaño mediano y un carácter tranquilo, ideal para la compañía.

Datos básicos

Así nació el gato Manx

El gato Manx es de procedencia británica. En concreto, es originario de la Isla de Man, localizada entre Reino Unido e Irlanda. Manx es el gentilicio de los habitantes de la isla. Es una raza bastante antigua. Su origen se sitúa en el siglo XVIII.

Se cree que a través del comercio marítimo llegaron a la isla gatos asiáticos con colas en espiral que viajaban en los barcos para el control de los roedores. De ellos acabaría por surgir el Manx. Y es que su especificidad reside en la ausencia de cola larga debido a una mutación espontánea de un gen recesivo producida en la columna vertebral.

Si dos gatos sin cola se reproducen, los gatitos fallecen antes de nacer o poco después. Por eso se recomienda dejar la reproducción del Manx exclusivamente en manos de criadores profesionales. La Federación Internacional Felina lo incluye en la categoría III, correspondiente a los gatos de pelo corto.

Leyenda del gato sin cola

Varias historias circulan alrededor de la particular cola del gato Manx. Una de ellas cuenta que esta se debe a un corte fortuito con las puertas del arca de Noé, cuando el Manx llegaba tarde por estar cazando ratones.

Una narración más épica los sitúa nadando hasta la Isla de Man desde los galeones de la Armada Española, destruidos en el siglo XVI. También se narra que surgió del cruce entre un gato y un conejo o que su cola fue cortada por un habitante de la isla de Man que circulaba en el medio de transporte típico allí: la motocicleta.

Características del Manx

La característica más destacada del Manx es que carece de cola o esta es muy pequeña, como si estuviese cortada, al disponer de muy pocas vértebras. Para participar en competiciones, el muñón resultante tiene que ser de alguno de estos tres tipos:

• Rumpy: cuando la cola está completamente ausente y solo existe un hueco en su base.
• Riser: si queda un leve saliente formado por tres vértebras.
• Stumpy: con cola con cierta movilidad pero siempre de menos de 3 cm de longitud.

En cuanto al cuerpo, su complexión es fuerte, compacta y robusta. El pecho es ancho y el lomo corto y redondeado. Las patas son cortas. Posee una cabeza ancha y redondeada. Todo él transmite una sensación de redondez. El cuello es corto y fuerte. La nariz es larga y las orejas son pequeñas y se disponen bien separadas. Los ojos son redondos.

Se presentan en color ámbar, cobrizo, verde, dorado, amarillo o anaranjado. El manto, en dos capas, es corto, liso, suave y posee un subpelo denso. Podemos encontrarlo en cualquier color, como blanco, azul, negro, rojo, crema o plateado. Se presenta en diferentes patrones como sólido, calicó, tortuga, atigrado, punteado o sombreado.

¿Gato Manx de pelo largo?

Sí, podemos encontrar Manx de pelo largo. Para algunos constituyen una raza diferenciada, pero lo cierto es que comparten las características del Manx y tan solo se distinguen por la longitud del pelo. Son los llamados gatos Cymric.

Personalidad del gato Manx

Los Manx son unos gatos muy inteligentes. De carácter tranquilo, también les gusta jugar y hacer ejercicio. Se adaptan muy bien a la vida en familia y aceptan sin problema los mimos. Son sociables y les gusta recibir atenciones. No tienen problemas a la hora de convivir con otros animales. De hecho, no parecen estresarse nunca. Como pega, son muy comilones.

Cuidados básicos para el Manx

Es muy importante vigilar la alimentación. Tenemos que respetar la ración diaria recomendada y no excedernos en los premios comestibles. La dieta debe ser de calidad, adaptada a la etapa vital del gato y elaborada principalmente con proteínas de origen animal.

Para ayudar a mantenerlo en forma necesita un ambiente enriquecido con espacio para correr, jugar y saltar. Mobiliario dispuesto a diferentes alturas, rascadores verticales, juguetes y escondites son elementos básicos para el bienestar felino. Dediquemos un rato cada día a jugar con él.

Se adapta tanto a la vida urbana como a la rural, pudiendo ser feliz con o sin acceso al exterior. En cuanto al cuidado del manto, dado su espesor, conviene cepillarlo con frecuencia, sobre todo cuando lo muda. Como mínimo, una vez a la semana.

Prevención de enfermedades en el Manx

En primer lugar, tienen tendencia a engordar, ya que les gusta mucho comer. Por ello debemos controlar su alimentación y mantenerlos en forma a través de la práctica de ejercicio. La obesidad no es solo un problema estético. Los kilos de más agravan problemas de salud como los que afectan a las articulaciones.

También predisponen a padecer otros, como la diabetes. Además, disminuyen la tolerancia al calor, al ejercicio y a la anestesia. Por otra parte, la mutación que ha originado la característica cola del Manx podría dar lugar a otras malformaciones óseas, con vértebras deformadas, fusionadas o en menor número del habitual.

En la zona de la cola las vértebras deformadas pueden originar molestias. En ocasiones estrechan el conducto anal, dificultando la expulsión de heces. Otros problemas de columna pueden provocar hidrocefalia y cuadros de afectación neurológica. Fuera de esta problemática se considera una raza sana.