El gato Himalayo

Los gatos Himalayo son el resultado de cruces entre Persa y Siamés. La mezcla ha conseguido unos gatos espectaculares, de manto largo y ojos azules, que, además, gozan de un carácter amigable, tranquilo y muy dispuesto al juego.

Datos básicos

Historia y origen del gato Himalayo

El Himalayo nace fruto del cruce entre dos razas felinas muy populares: Persa y Siamés. Así, su aspecto físico recuerda más al del Persa, aunque con los ojos azules y el patrón de color típico del Siamés. Este era el resultado final que buscaban sus creadores. Dado estos parecidos algunos lo consideran como un Siamés de pelo largo o una subraza del Persa.

En cualquier caso, los gatos con estas características empezaron a buscarse ya en la década de 1920 en diferentes puntos del planeta, como Estados Unidos, Canadá, Reino Unido o Suecia. Como los criadores compartían parte de sus hallazgos, se puede decir que la creación del Himalayo fue un trabajo de equipo que dio sus frutos en la década de 1950.

En Reino Unido se denominó Colourpoint de pelo largo, en Estados Unidos Himalayo y, en cambio, en Europa suele hablarse del Himalayo como una variedad del Persa. Hoy en día sigue la controversia en cuanto a su denominación y su consideración como raza única. Parece que la tendencia es a definirlo como una variedad del Persa.

Características del Himalayo

Son gatos de cuerpo y patas cortas y anchas. Junto a unos huesos fuertes, el resultado del conjunto es un aspecto redondeado. Gracias a su pelo, todavía parece más imponente. Por su parte, la cabeza es triangular y finaliza en un cuello corto y fuerte. La nariz es corta y chata.

Las orejas son pequeñas, triangulares y de punta redondeada. Los ojos son grandes, redondos y se disponen bien separados. Se presentan en color azul, pero, también, en cobre o en verde. La cola es gruesa y está bien cubierta de pelo.

El pelo destaca por ser largo, liso y sedoso. Consta de dos capas, siendo la interna muy densa. Lo encontramos en colores como el crema, el lila, el marrón o el gris. También hay diferentes patrones, como el tortuga, el tricolor y, el más popular, el colourpoint. Nacen blancos y se van coloreando con el tiempo.

Temperamento del gato Himalayo

En general, son gatos inteligentes, alegres y tranquilos. Se muestran muy cariñosos con sus cuidadores, con los que mantienen un estrecho contacto, pero suelen ignorar a las personas que no son de su confianza.

Demandan y necesitan atención. Les gusta dormir encima de su cuidador, ya sea en el sofá o en la cama. Son sensibles al bullicio, por lo que los hogares con niños, otros animales o, en general, mucho movimiento de personas no son los más adecuados para estos gatos.

Son más felices en un ambiente tranquilo. Su nivel de energía se considera bajo. Les gusta estar tranquilos, aunque esta actitud cambia cuando se arrancan a jugar. Sufren una explosión repentina de energía, más habitual en su etapa de gatito. No suelen maullar.

Cuidados básicos del Himalayo

Son gatos que se adaptan bien a la vida en el interior de un apartamento, pero necesitan la compañía de sus cuidadores y que les dediquen un rato a diario para jugar. Disfrutan jugando vigorosamente, en contraste con la tranquilidad que manifiestan el resto del día. Se recomiendan juguetes interactivos y, en general, cualquiera para perseguir y atrapar.

Es importante que cuidemos su alimentación y los animemos a practicar ejercicio a diario para evitar el sobrepeso. Además, como todos los gatos de pelo largo, su manto requiere cuidados regulares para evitar enredos y la ingesta excesiva de pelo durante el autoacicalado.

Se recomienda una sesión de cepillado todos los días, que, además de mantener el pelaje sano, fortalece el vínculo gato-cuidador. Escoge un cepillo apropiado para este tipo de pelo. Pueden aconsejarte en una peluquería felina. A este respecto, también podemos darles malta de vez en cuando para facilitar la expulsión del pelo que traguen.

Enfermedades más comunes del Himalayo

Tienen tendencia a engordar, por eso hay que evitar la vida sedentaria y vigilar la alimentación. Es importante escoger una dieta de calidad, respetar la ración diaria y no excederse con los premios. La obesidad no es solo un problema estético, ya que tiene importantes repercusiones en la salud.

El pelo largo también puede originar problemas. Si el gato lo ingiere en grandes cantidades, junto a alimentos y jugos gástricos, pueden formarse bolas que causan alteraciones digestivas e incluso obstrucciones. Para prevenirlas se recomiendan cepillados regulares y fomentar un buen tránsito intestinal con una alimentación de calidad, hidratación y ejercicio.

Podemos añadir malta a su dieta y, si le damos pienso, mejor combinarlo con alimento húmedo. Otro punto de atención es la nariz. Los Himalayos pueden sufrir problemas respiratorios derivados de su anatomía, al igual que son más propensos a trastornos oculares. Por último, una enfermedad hereditaria a tener en cuenta es la poliquistosis renal.