Testarudos a la vez que cariñosos, los canes de esta raza son excelentes perros de compañía. Les encanta pasar tiempo en familia y se muestran muy pacientes con los niños, a quienes adoran.
Llevan en los genes un poderoso instinto de protección y un coraje que explica sus cualidades como perro guardián. Conoce las características más importantes del Bulldog inglés en el siguiente artículo.
Datos básicos
Dimensiones: entre 30 y 40 cm
Peso aproximado: 25 kg para los machos y 22 para las hembras
Cuánto viven: entre 8 y 10 años
Ideales como: perros de compañía y perros guardianes. Pueden vivir en casas o pisos de todo tipo. Se adaptan bien a las familias con niños.
Historia del Bulldog inglés
En la Inglaterra medieval estos perros se utilizaban como cuidadores de ganado bravo. Además, debido a su gran valor y potencia física, fueron una de las razas más utilizadas para combatir contra toros, osos e incluso leones.
Durante esta época eran llamados “perros de carnicero”, ya que eran utilizados para perseguir a ciertos animales durante su camino hasta el matadero.
En aquel entonces el aspecto de los Bulldog difería bastante del actual. Eran más altos y ligeros, con una poderosa musculatura que recordaría a un Bóxer o a un Bull Terrier.
De hecho, hay diversas teorías sobre sus antepasados. Algunos sostienen que descienden de la legendaria raza de perros Alano, originaria de Europa Central. Otras hipótesis aseguran que su génesis se remonta al Mastín Tibetano y que llegaron a las islas británicas con los romanos. Una tercera posición les emparenta con una raza de canes africanos, los kelb thal gliet.
Con el paso de los siglos, y debido al cruce con otras razas como el Carlino, su porte ha ido mutando hasta su apariencia actual.
Principales características del Bulldog inglés
La robustez es el rasgo más marcado del Bulldog inglés. Son canes corpulentos y un tanto rechonchos. Además tienen patas cortas y musculosas, bien separadas y ligeramente arqueadas. Esto les da un andar muy característico de la raza, conocido popularmente como “de cangrejo”.
Estos perros tienen hombros anchos y musculosos, con un cuello extremadamente corto y una gran papada. La cabeza es grande en comparación al cuerpo y a su rostro achatado.
Los pliegues en la frente son otro de sus aspectos más característicos. Cuentan, además, con mofletes caídos y una mandíbula inferior en la que sobresalen afilados colmillos. Las orejas del Bulldog inglés son pequeñas y se inclinan hacia adelante.
La piel de su cuerpo, por otro lado, es suelta y colgante, con arrugas en determinadas zonas. Tienen un pelo corto y liso, con colores que van del atigrado al rojizo, pasando por el beige y el blanco. La cola suele ser recta y gruesa, aunque también puede estar enroscada.
¿Qué temperamento tienen los canes de esta raza?
Pese a su aspecto de permanente enfado y su imponente presencia, los Bulldog son canes muy cariñosos, amigables y dóciles. De hecho, destacan por ser especialmente cuidadosos con los niños. La paciencia es una de las grandes virtudes de la raza.
Por lo general son perros sociables, con una gran estima por las personas y que se adaptan bien a la vida en familia. También son muy sensibles a cómo los humanos se comportan con ellos, por lo que es fundamental brindarles grandes dosis de cariño. Aún así, son bastante tozudos. Esto hace que a veces sean difíciles de adiestrar.
Al estar siempre atentos tienen buena fama como perros guardianes, lo que guarda relación con su herencia. Cuando están con extraños mantienen las distancias y pueden ser un poco territoriales con otros perros, especialmente si no son conocidos.
Por otro lado, los ejemplares de esta raza tienden a babear en exceso y a resoplar mucho. También roncan ruidosamente cuando duermen, así que, ¡a buscarse tapones!
Cuidados específicos del Bulldog inglés
Los Bulldog son un poco perezosos y necesitan ejercicio moderado, ya que no resisten muy bien las actividades que suponen un gran esfuerzo. Sin embargo, una dosis diaria de actividad, por pequeña que sea, es imprescindible para evitar el sobrepeso.
Son perros bastante sensibles a los climas extremos. Un calor excesivo puede generarles problemas respiratorios y, si las temperaturas son muy bajas, tienden a resfriarse. Por ello, no hay nada mejor que un clima templado para un Bulldog inglés.
Al ser corto, su pelo no requiere demasiadas atenciones: un cepillado semanal será más que suficiente para mantener su elegancia. La muda de pelo en esta raza es moderada, así que no es algo que deba preocuparte demasiado.
También se recomienza bañarle una vez cada mes o mes y medio, aunque el aseo de los pliegues de su rostro deba hacerse cada dos o tres semanas. Con ello evitarás posibles infecciones cutáneas, muy arraigadas en esta variedad canina.
Del mismo modo, hay que controlar frecuentemente la zona alrededor de sus ojos, que tiende a acumular suciedad. En la nariz es recomendable aplicar vaselina para evitar que se reseque.
¿Cómo debemos alimentar a un Bulldog Inglés?
Al tratarse de una raza pequeña pero robusta, debemos alimentarlos con un pienso de alta calidad que procure un desarrollo adecuado y sin deficits.
A partir de las siete semanas de vida recomendamos utilizar Puppy Gourmet, por su gran aporte nutricional a nivel biológico y por ser muy palatable (sabroso). Podemos mantener este pienso hasta el fin de su desarrollo o cambiarlo por uno de croqueta de mayor tamaño a partir de los ocho meses de vida, por ejemplo Maxi Junior.
Una vez haya terminado su desarrollo, algo que suele suceder entre los 14/16 meses de vida, podemos optar por Maxi Adult o por Large Breed Gourmet, ambos son piensos muy nutritivos, completos y variados que están específicamente formulados para perros de más de 22 kilos de peso en su edad adulta.
Además la gama Gourmet tiene un extra en condroprotectores, los cuales ayudarán a mantener sanas sus articulaciones.
Dado que es una raza algo propensa a presentar intolerancias alimenticias, si se diera y supervisando bajo prescripción veterinaria cuales son los ingredientes que no tolera, podríamos optar por Beef & Vegetables o Digestive Plus Hipoallergenic.
¿Qué enfermedades pueden afectarle con mayor frecuencia?
El Bulldog inglés es un perro propenso a la displasia de cadera, una afección que puede empeorar por la tendencia al sobrepeso de estos canes. La obesidad también degenera a menudo en otros problemas de salud, como lesiones óseas y enfermedades cardíacas.
Por otro lado, el característico hocico chato que tiene está relacionado con el síndrome braquiocefálico, una condición hereditaria que deteriora progresivamente su capacidad respiratoria y que provoca afecciones de diversa índole, como la apnea del sueño, las hipertermia (tendencia a sufrir “golpes de calor”) o las dolencias del aparato digestivo como la torsión gástrica, la mala digestión o una gasificación intestinal excesiva.
Los ojos son, finalmente, otra zona sensible. Padecimientos como el entropión y el ectropión, que causan que el párpado se pliegue hacia dentro o hacia fuera, tienen una alta incidencia en este tipo de perros. Este problema conlleva una irritación y un enrojecimiento de los globos oculares, que hace necesaria una cirugía correctiva.