La creación de la raza de gato Sphynx se sitúa en tono a 1966, cuando una gata blanca y negra dio a luz a un gatito sin pelo en Ontario, Canadá. El propietario de dicha cría lo bautizó como Prune, debido a su piel arrugada y sin pelo.
Este nuevo gato se cruzó con otros en un intento de crear más camadas sin pelo. A estos gatitos se les llamó “gatos sin pelo canadienses”, lo que derivó a que algunas personas los llamasen gatos Sphynx, debido a sus similitudes físicas con una antigua escultura felina egipcia llamada Esfinge.
Entre 1975 y 1978, se encontraron varias mutaciones naturales de gatitos sin pelo en Minnesota y Toronto, los cuales fueron llamados Epidermis, Punkie y Paloma. Por su parte, la TICA reconoce esta raza desde hace más de 20 años y en la actualidad hay varios miles de Sphynx registrados en el mundo.
Consiguiendo como resultado, posicionarse como uno de los gatos más demandados dada su apariencia y similitud con la esfinge egipcia. Debido a ello, no suelen encontrarse fácilmente y su precio puede ascender a una cantidad elevada de dinero, a diferencia de otras razas.
Morfología de la raza Sphynx
Según la información del estándar de la raza Sphynx que viene detallada en TICA (The International Cat Association), es una de las pocas razas sin pelo. De aspecto llamativo y característico, aunque no carecen totalmente de pelo.
La piel de la mayoría de los Sphynx está recubierta de una fina capa que le confiere una textura de gamuza. El pelo claro suele ser visible en la nariz y en la parte posterior de las orejas. Los Sphynx vienen en una variedad de colores, incluyendo sólido, particolor, atigrado, carey, y están reconocidos en las cuatro categorías de la TICA: Tradicional, Pointed, Mink y Sepia.
Su color se ve en el pigmento de la piel y en los pocos pelos que tienen. Quizá su segunda característica más distinguible sean sus enormes orejas, con frecuencia de más de 5 o 6 cm de altura. El Sphynx también tiene una expresión abierta y dulce, facilitada en gran medida por los grandes ojos en forma de limón.
Se trata de un gato robusto, de huesos medianos, atlético y muy musculoso. El vientre del Sphynx debe dar la apariencia de haber ingerido recientemente una comida abundante. Debido a su naturaleza amistosa, los Sphynx suelen ser excelentes gatos de exposición, ya que aceptan bien a la gente nueva y son fáciles de manejar.
Por otra parte, debido a su falta de pelaje absorbente, los Sphynx tienden a engrasarse y necesitan ser bañados a menudo, al menos varias veces más que lo normal en otras razas de gato, pero no son hipoalergénicos.
Campeones de Sphynx
El gato de esta raza más reciente y actual que podemos mencionar y que consiguió ganarse todas las miradas y ser el centro de atención en a última exposición, es un gato de color chocolate point llamado Starry Night, que ganó el título de «Mejor Gato de la Exposición» en la Cat Fanciers’ Association (CFA) este año 2023.
Por otra parte, en la anterior competición del año 2022, el ganador que consiguió recibir toda la atención fue Midnight Magic, un gato de color azul point, que ganó el mismo título que Starry Night.
El acto en sí de conseguir recibir algún título en competiciones tan importantes como esta, hacen que la raza ganadora se haga famosa y conocida en países donde antes no tenían tanta demandada. En este caso, aunque en España no es el caso, en países como Alemania no suelen venderse tanto, por ello, estas exposiciones son perfectas para darle el renombre que se merecen.
¿Cuánto cuesta un cachorro de Sphynx?
Aunque el precio es solo una estimación, algunos ejemplares de gato Sphynx pueden llegar a costar 3.000 euros. Pero claro, como hemos comentado en otras ocasiones, si estás pensando en comprar un cachorro de alguna raza de gato en especial, el precio final dependerá del pedigrí del animal, la edad, la ubicación y demás factores importantes.
Si al final te decides por un cachorro de Sphynx, te recomendamos acudir a un criadero especializado en España que pueda informarte y asegurarte la salud y calidad del gato.