Como todos los galgos, el Sloughi se define por su cuerpo delgado y esbelto. Amante del ejercicio y de la velocidad, si quieres compartir vida con él debes ofrecerle oportunidades suficientes para desplegar su gran energía.
Datos básicos
- Peso: 20-27 kg.
- Altura: 61-72 cm.
- Esperanza de vida: 12-15 años.
- Ideales para: personas muy activas y con espacio.
Historia del Galgo africano
El Sloughi es una raza de perros originaria del Norte de África. Su aparición se pierde en épocas remotas. Se cree que estos perros ya acompañaban a las tribus árabes de vida nómada que invadieron la zona noroeste del continente africano hace más de 1000 años.
Incluso algunos hallazgos arqueológicos apuntan a una antigüedad mayor, de hasta 2000 años. Estas tribus establecían una relación muy estrecha con sus perros Sloughi. Los trataban como miembros de la familia de pleno derecho y lloraban sus fallecimientos.
Las funciones de estos galgos abarcaban tanto la guarda de propiedades como la caza de liebres, zorros o gacelas que habitaban en el desierto. Se piensa que están relacionados con otros galgos africanos que convivían con reyes y faraones. Hoy en día viven fundamentalmente como perros de compañía.
Características del Sloughi
Se trata de un perro de tamaño grande y de aspecto esbelto, bien musculado y proporcionado, que recuerda mucho al Saluki. La cabeza es alargada y tiene forma de cuña. Posee los ojos grandes y oscuros. Transmiten una expresión gentil, aunque algunos la consideran triste. La nariz es de color negro.
Tiene unas fosas nasales grandes y bien abiertas. Lleva las orejas caídas. Son de tamaño mediano, de inserción alta y forma triangular. La caja torácica tiene un tamaño considerable, lo que favorece su capacidad pulmonar. Las patas siguen la línea corporal, con lo que son largas, esbeltas, ligeras y delgadas. La cola es muy fina. El pelo es corto, fino, suave y liso.
A la vez es denso y no retiene el calor. La gama de colores que presenta este manto varía entre el arena y el leonado. Estas tonalidades constituyen una adaptación perfecta a su hábitat, ya que le sirven como camuflaje en el desierto. De esta forma sorprendería a sus potenciales presas. Aun así, algunos ejemplares pueden ser de color blanco o negro.
Carácter de la raza Sloughi
Es muy activo. Quizás este sea el rasgo más importante a tener en cuenta antes de adoptar un ejemplar. Sin posibilidad de ejercitarlo, no se recomienda. Es un buen y valeroso guardián, tarea en la que destacó desde sus orígenes. En ocasiones puede mostrarse desconfiado con los extraños, ya que es reservado y tímido, llegando a manifestar agresividad.
Por esta tendencia, su agilidad y su nivel de actividad, que puede degenerar en nerviosismo, no es adecuado para niños. Se recomienda para adultos con más estabilidad y orden para no descontrolarlo. En cuanto al carácter, es leal, fiel, dócil y protector con su familia, a la que no dejará nunca. Es inteligente, sensible y cariñoso. Necesita un entorno afectuoso.
La confianza es la base de la relación con el Sloughi. Algunos ejemplares son tímidos, lo que potencia su desconfianza ante desconocidos. Puede mejorarse con la socialización. La educación en obediencia también es imprescindible. Debemos invertir tiempo y paciencia en ella, sobre todo en los ejemplares más introvertidos. Si dudas, consulta con un especialista.
Todos los cuidados para el Sloughi
El Sloughi no es el perro más apto para mantener en el interior de un apartamento en la ciudad. Si fuese el caso, solo podríamos mantener su bienestar si le proporcionásemos ejercicio intenso todos los días. Prefiere los climas soleados. Al tratarse de un perro muy activo es imprescindible que disponga de espacio.
Necesita oportunidades suficientes para poder quemar toda la energía que lo caracteriza. Requiere actividad y, con frecuencia, esta debe ser intensa. Le encanta correr y tenemos que proporcionarle espacio para poder hacerlo. También adora los juegos y los juguetes. Gracias a su inteligencia, podemos ofrecerle juegos que lo estimulen y le supongan un desafío.
Así también mantenemos activa su mente y evitamos el aburrimiento. Aun así, varios paseos al día se hacen imprescindibles. Aunque, como hemos explicado, no sirve solo con sacarlo unos minutos atado a una correa. Es candidato a practicar deportes caninos como el agility. En cuanto a su pelaje, es muy sencillo de cuidar. Solo necesita un cepillado de vez en cuando.
Enfermedades de la raza Sloughi
Esta raza, en líneas generales, disfruta de una buena salud durante toda su vida. Por ello podemos centrarnos en cuidar su bienestar psicológico, que es igual de importante. Las claves para mantenerlo son la actividad física y la estimulación a nivel mental. Sin ellas tendremos un perro estresado, ansioso y frustrado.
En los ejemplares de Sloughi pueden aparecer conductas destructivas, vocalizaciones excesivas, eliminación inadecuada, etc. En casos graves necesitaremos la ayuda de un profesional del comportamiento canino como puede ser un etólogo.